1. ¿Te acuerdas Papá?


    Fecha: 06/08/2020, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Sólo tenía 13 años... ¿Lo recuerdas? Ya había empezado a desarrollarme. Los pelos de mis piernas se hacían más gruesos, negros y rizados; ya empezaba a sudar más de mis axilas, por lo que mi olor ya no era el de un niño, sino el de un hombrecito. También mi voz comenzaba a volverse más grave; y mis huevos y Verga estaban haciéndose más grandes y con vellos negros alrededor. Pero igual yo seguía siendo tu niño consentido... ¿No es así?
    
    Un domingo por la tarde, recuerdo que era verano por lo que el calor y sopor eran muy intensos y pesados; nos pusimos a ver la televisión en tu recámara, sólo estábamos los dos como siempre había sido, tú y yo, Padre e Hijo…
    
    Nos habíamos recostado uno al lado del otro en tu cama, yo siempre buscando estar junto a ti sin importarme el calor. ¿Recuerdas que sólo estaba usando un corto y apretado bóxer azul marino, muy ceñido a mi delgado y firme cuerpo? Tú como es tu costumbre únicamente te habías dejado un calzoncillo blanco tipo trusa, ya amarillento por los restos de tus fuertes orines y seca esperma. Se te formaba un gran bulto y se escapaban muchos de tus pelos púbicos por los costados. Yo no podía, y aún no puedo, el evitar todo el tiempo desviar mi mirada a tu viril entrepierna.
    
    Los dos estábamos muy relajados, así que en el momento que tu pusiste tus brazos detrás de tu nuca, dejando descubiertas tus axilas peludas, yo poco a poco me acerque aún más a ti, de manera que mi cuerpo estaba pegado al tuyo y mi rostro quedó a la ...
    ... altura de tus sobacos sudados... No pude evitarlo, el fuerte olor a Macho que expedían tus axilas velludas me atraía… Que puedo decirte, tus feromonas masculinas tienen un fuerte efecto sobre tu Hijo... Me volteé para quedar de lado y con mi cara justo en los pelos de tu axila, así que sin saber el por qué les di una fuerte olfateada. Tú te diste cuenta casi de inmediato.
    
    --- ¿Papi huele muy fuerte y feo, no es así Hijo?
    
    --- ¡No! Bueno…si hueles fuerte a hombre Papi, pero ¡me gusta! Ehm…me siento protegido cuando percibo tu olor a Macho...
    
    --- ¡¿En serio Hijo?!
    
    Fue algo que te sorprendió ¿No? El que fuera tan sincero contigo, pero no te enojaste, creo que te hizo sentir bien. Me dejaste seguir así, acurrucado debajo de tu brazo y sobaco… Algo se había apoderado de mí, porque me acerqué y te pasé mi lengua por tu axila, pude saborear el salado de tu sudor y sentir lo áspero de tus gruesos pelos contra mi lengua.
    
    --- ¡Hijo! ¡¿Pero qué haces?!
    
    --- Nada Papá…sólo quería probar a que sabía tu sobaco...
    
    --- ¡Oh...! ¿Y a qué te supo?
    
    --- ¡A Macho!
    
    Te dije sonriendo aún con inocencia infantil, de esa que te gustaba tanto como cuando me cargas en tus musculosos brazos y me alzabas como tu niño mimado.
    
    Entonces tú me devolviste la sonrisa y me abrazaste de manera que me llevaste hasta tu peludo pecho… Yo me quedé ahí recostado en esa suave almohada de vellos... Mis piernas se entrelazaron con la tuya, claro más gruesa, robusta y peluda que las mías. Y ...
«1234...10»