1. La mamá de mi amigo es prostituta (3)


    Fecha: 02/08/2020, Categorías: Sexo con Maduras Autor: blackbird, Fuente: SexoSinTabues

    ... chupaba sus pezones. Se acomodó para hacerme sexo oral y cuando mi pene sintió la húmeda calidez de su boca, sentí el cielo. Como estaba muy caliente me vine a los pocos minutos y, con mi pene algo flácido, siguió masturbándome. -La chupas muy rico. -Siempre me dices eso. Oye, estoy preocupada. Si regreso a mi casa muy tarde, mi marido se va a molestar. -Cierto, me olvidé preguntarte. ¿Qué le dices a tu marido cuando llegas a tu casa a estas horas? -Le digo que estoy en la lavandería con el cuento de que también trabajamos con algunas empresas que nos dejan sus uniformes y que los necesitan lo más pronto posible, por eso la lavandería también funciona de madrugada. También le dije que yo misma me ofrecí para trabajar en ese turno ya que la paga es mayor. Pero la verdad es que no trabajo los fines de semana. -¿Y se creyó ese cuento? -Parece que sí, hasta ahora no me ha dicho nada, pero creo que se las huele y si llego a casa más tarde de lo normal pues con más razón. -Te prometo que cuando terminemos, nos vamos de aquí. – le dije. -Ay, que considerado. – bromeó. -Y entonces, ¿por qué lo haces? – pregunté refiriéndome a su trabajo como prostituta. -Tenemos muchas cosas que pagar, además la universidad de Angelo no es barata y todavía falta que mi segundo hijo entre a la universidad. -respondió. -Ya veo y ¿no te ha tocado estar con tu marido cuando estas sensible por el trabajo? – pregunté refiriéndome a sus partes íntimas. -Sí y es muy incómodo, pero me aguanto para que no ...
    ... sospeche. Pero a veces es casi insoportable y como él no sabe pues me lo hace ganas. -Pues yo te lo haré más despacio, mi amor. La tumbé para que quede boca arriba, con ese hermoso panorama que tanto me fascina, me puse el condón y con la cabeza froté la entrada de su vagina. Olga se estremeció un poco y me volvió a repetir que vaya despacio. Lentamente fui entrando en su interior, le di muchos besos en su cuello y poco a poco la estuve penetrando. Empezó a jadear un poco y sus pezones se pusieron duritos, vaya que sí estaba sensible. Cumplí mi promesa, fui delicado con ella, la traté como si fuese una niña primeriza. Le di muchos besos, le chupé sus deliciosos pezones y mis embestidas no fueron brutales como las veces anteriores, sin embargo, ella lo estaba pasando bien. Por primera vez sus gemidos eran reales, ya no estaba la mujer fría que se contenía, ahora tenía a una mujer súper excitada que gozaba del sexo. Su vagina era una cascada, nunca la había tenido tan mojada. Estaba tan mojada que su vagina hacía ruidos húmedos cuando la penetraba. Con el tiempo fui dándole con más fuerza y Olga respondía gimiendo con más ganas. Su placer era tanta que me clavaba sus uñas, que por cierto me dejaron algunas marcas, me arañaba la espalda y los brazos, pero no me importaba, nuestros placeres se conectaron y no había fuerza que nos detuviera. Llegó el momento donde no pude con tanto placer y me vine a chorros, nos quedamos inmóviles con la respiración agitada y por primera vez nos ...