MADURITA Y CUERNOS - Relatos Eróticos

MADURITA Y CUERNOS

Así estuvimos mas de dos meses, yo no tenía nada mejor, pasaba las tardes o noches conversando, a veces intentaba que quedaramos pero siempre se negaba, hasta que lo conseguí, una cita en la estación de autobuses de la ciudad, solo para conocernos y tomar algo, llegué media hora antes me senté en la cafetería, hacía unos días me habia dado un numero de movil y solo hablabamos por wasap cuando ella lo hacía primero. Supe que era ella nada más verla entrar por la puerta de la cafetería, me miró y se dió la vuelta, al instante, sabeis por que pues porque la conocía era de mi pueblo, aunque nunca habiamos hablado, la había visto muchisimas veces de paseo con su marido e hija. Durante dias le mandé wasap me daba siempre apagado, tampoco por skype, además de que la vi por el pueblo varias veces a veces con el marido a veces sola con su hija, aún me ponia mas caliente verla, ella disimulaba, pero sabía que yo la habia descubierto, pasó al menos dos semanas de aquella cita, cuando una tarde tuve un wasap de ella. - Hola - Hola porque no me has contestado Tarde en recibir la respuesta. - Nos conocemos verdad - Je je si vaya casualidad no - Si, pero me da mucho corte al vivir en el mismo pueblo -Yo no voy a decir nada - Eso espero pero ya no quiero quedar contigo - Por que - Ya te lo he dicho es peligroso - Podemos quedar fuera, No dejó de mandarme wasap, decía querer dejarlo pero siempre me contestaba a los wasap asi durante dias, hasta que aceptó quedar una mañana en otro lugar esta ...

... vez, a su hija la dejaba en el cole a las 9 de la mañana, yo libro los martes y miercoles, quedamos, solo para tomar un cafe en una cafetería de la cercana ciudad, ella no conduce tuvo que ir en bus, antes de las 10 de la mañana al fin la vi acercarse con sus gafas de sol a la cafetería que yo estaba esperando, que emoción pensé llevaba una cazadora una blusa y una falda, esta vez se sentó tras darnos dos besos, tiene una voz calmada suave, que me excitó nada mas escucharla hablar, hablamos sobretodo de la casualidad de como nos habiamos conocido además del miedo que tenía ella a ser descubierta, me di cuenta que ella estaba tan nerviosa o mas que yo, su marido estaba trabajando, fuera, se pasaba dos tres dias fuera y volvía, apenas estuvimos 45 minutos allí cuando ya ella se quería volver al pueblo, me decía que ya nos habiamos conocido y que nada más, pero estaba nerviosisima, me ofrecí a llevarla en mi coche al pueblo, ella decía que no que cuanto menos viera nadie, le dije que no habia pasado nada que viniste a la ciudad y te vi me ofrecí a llevarte, aceptó. Con las mujeres siempre he sido un chico mas bien retraido, no lanzado ni descarado lo reconozco, ibamos en mi coche, saliendo de la ciudad con mucho trafico a esa hora, ella es mas alta que yo ademas de tener un cuerpo mas grande que el mio, tengo un coche muy pequeño, iba cambiando las marchas y cada momento tocaba su muslo con la falda, ella intentaba retirarlo una y otra vez a mi vez iba pensando en que haria tras ...