1. Una rica cogida anal en un verano ardiente


    Fecha: 25/06/2017, Categorías: Anal Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Como era costumbre cada verano, el sol ha estado brillando desde un cielo azul todo el día. Brillante, intenso y caliente. Pero este año las cosas iban peor. Estabamos casi a 50 grados y segun los pronosticos en los proximos dias se esperaba mas aumento en la temperatura. Habia terminado el turno en mi trabajo y me dirigía a casa. Manejaba mi coche por las avenidas, era la hora de salida de la mayoria de los trabajadores y las calles estaban atestadas de trafico vehicular.
    
    A pesar de llevar el aire acondicionado de mi auto al maximo nivel, pareciera que lo llevara apagado. Mi frente me sudaba, bajando hasta mi ojos y cegandome momentaneamente, obligandome a limpiar el sudor con mi mano y por consecuencia embarrando el rimel de mis ojos por todo mi rostro. Miré el reflejo de mi cara en el espejo retrovisor y realmente me veia horrible. Por un momento pasó por mi mente esas escenas en las peliculas porno donde la chica realiza sexo oral profundo y termina con lagrimas negras de maquillaje por todo su rostro. No me importaba verme asi, pero mil veces hubiera preferido que fuera a consecuencia de mamar una buena verga y no por los efectos de este maldito calor.
    
    De igual manera el sudor corria por toda mi espalda hasta llegar a la raja que separaba mis nalgas. Sentía los pelos de mi panocha pegajosos por el sudor, y no se si era mi imaginación pero me daba la impresion que el interior del auto apestaba a panocha remojada. Y aún me faltaban varias millas para llegar a ...
    ... casa. Mi humor era el de una autentica perra rabiosa. Si de por si mis compañeros de trabajo me consideraban como antisocial, bitch y con una cara de pocos amigos, si me vieran en ese momento estarian completamente convencidos de todo eso.
    
    -”BEEEEP BEEEPP!!!!” -hice sonar el claxon varias veces, tratando de apurar el paso de los demas autos, de manera inutil.
    
    -”Porque chingados no avanzan, putas tortugas inutiles??” -pensé para mis adentros mientras maldecia una y mil veces el infernal calor que estaba haciendo. Quería llegar a casa y desnudarme, tomar una cerveza fria y una ducha con agua helada. Y hacerlo todo al mismo tiempo si fuera posible.
    
    Finalmente llegué a mi casa, Estacioné mi auto y me bajé lo mas rapido que pude. Me urgía entrar y deshacerme de mi estorbosa ropa. La curva de mis senos se notaba a la perfección a causa de la humedad de mi blusa, y la mancha de sudor en mi culo a través de pantalon era muy visible. Los pantalones vaqueros no deberían permitirse en un día como este. Un vestido de verano sería una mejor solución. Correas sobre hombros desnudos, muslos desnudos. La posibilidad de una suave brisa levantando ligeramente el vestido y llegando a mi entrepierna. En ocasiones como esta me arrepentia de vestir tan goth y de tapar mis tatuajes con mangas largas.
    
    Al cruzar hacia mi casa, miré a la casa contigua y vi a un adolescente de unos 15 o 16 años aproximadamente llegando a la casa vecina. Me imagino que venia de la escuela y, al igual que yo, ...
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