1. Bailando con mi primita


    Fecha: 27/03/2020, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... moviéndose lentamente, la oía gemir como perrita en celo, llevábamos un buen rato hasta que sin darme cuenta comencé a soltar leche como un surtidor mojándome totalmente los short, con cuidado y con vergüenza me separe y le dije que iba un momento a mi cuarto, fui y me limpie cambiándome los short, me veía en el espejo y me decía que locura había hecho que como se enteraran en mi familia me iban a matar, estaba bien nervioso por todo lo ocurrido. Salí y fui hablar con Sofía que estaba en un sillón viendo dibujos, me senté al lado y le dije que de todo eso no se podía enterar nada pues nos matarían a los dos, exagere un poco las cosas y ella me decía que no diría nada nunca, le dije que no volveríamos a repetirlo pues no era adecuado, se echó a llorar y me dijo que ella quería volver a bailar conmigo que yo no me reía de ella y que los otros niños se burlaban de ella, le volví a decir que no era adecuado y que había un peligro que era si sus padres se enteraban de que yo le enseñaba a bailar el perreo me iban a curar bien, le dije que no podía ser y ella seguía llorando hasta que por pena le dije que a lo mejor otro día podríamos verlo, pero siempre a escondidas, se calmó y luego se fue. Al otro día cuando me levante mire a los chiquillos de detrás de casa y allí estaba Sofía, me vio a través de la ventana y me dedico una linda sonrisa, le correspondí, al rato se fueron yendo y solo quedo ella y vino hacia mi casa, le abrí la puerta y entro rápidamente, vestía una ...
    ... camisetita de dibujos y una faldita bien chica, le di un besito en la mejilla y enseguida me dijo que si bailaba con ella un poco, la verdad es que estaba recaliente desde que la vi por la ventana, le dije que un par de canciones que me esperara, fui a mi cuarto y me puse un short viejo flojito y no me puse nada debajo y salí, puso la música y directamente me agache y le coloque mi verga en su canal, la tenía ya bien dura ella miro pícaramente hacia atrás y empezó a moverse rozándose por toda la longitud de mi verga, ella se movía y yo igual lo disfrutábamos enormemente, me agache un poco y al igual que el día anterior se la coloque entre sus piernitas, la serruchaba lentamente como si me la estuviera cogiendo ella gemía al igual que yo como perra en celo, ya no se oía la música nos oíamos nosotros, yo la animaba “muévete así mamacita, toda es tuya…” ya no había nadad de inocencia por su parte y menos por la mía, una de mis manos siguió su curso y le acariciaba su barriguita y siguió hacia arriba y solo se encontró con un botoncito por pezón que a ella le gustaba que le tocara, esa mano inquieta siguió tocando por donde quería hasta que siguiendo el camino de su ombligo siguió para abajo y le cogía la conchita y le acariciaba la rajita mientras ella temblando se movía, se echó hacia delante y se apoyó en un sillón con su culito bien en pompa, la serruchaba bien duro y lento, sentí como dejaba ir su cuerpito y me di cuenta de que se estaba corriendo, aproveche yo también para hacerlo ...