Un Pecado - Relatos Eróticos

Un Pecado

... éxito demasiado. La seguí besando y esta ves ella llevaba el ritmo de las cosas... Le mordí sus carnosos y rosados labios. Abrió los ojos y me dijo-Eres muy pervertida, apenas te e tocado un poco y ya estas muy mojada, eres mejor de lo que esperaba, debo decirte que me enamoraba este cabello negro, tu piel tan blanca, labios delgados y rosados, ni hablar de tus ojos marrones. Quieras o no, te haré mi esclava y no dejare que nadie mas te toque- Me sorprendió muchísimo, era una persona que aborrecía al verla y ahora estaba encima de mi manoseándome y besándome por todos lados. Me quito la pantaleta y con la misma empezó a sobarme el clítoris muy lentamente, puso su lengua encima junto con sus labios y parecía que succionaba todo lo que estaba ahí, yo no podía controlarme. Sabia que mis tíos estaban en la casa, no sabia que hora era y si seguían despiertos, pero gemí muy quedito para que no me oyeran-¡Ah!,¡Ah!...Mmm, ¡Ahhh!-Ella se veía mas contenta al oírme- No te contengas, sigue, no hay nadie en casa, ellos se fueron de calientes a un hotel, tenemos la casa para nosotras- Me dieron confianza sus palabras y al terminar eso, su sexo oral era mucho mas intenso, no podía aguantarlo; Su lengua la podía sentir claramente, como subía y bajaba, sus labios besando mi Vagina y succionando mi clítoris-¡Ahhh! ¡Ahhh!, más Caro, por favor ¡Más!- subió sus manos hasta mis pechos y empezó a pelliscarlos tan... ...

... Delicioso, yo solo babea del placer que sentía. Me levante y me puse encima de ella totalmente desnuda y muy excitada y la empece a besar, le sobe sus enormes pechos con una mano y con la otra le acariciaba la cara, frotaba lentamente mi Vagina contra su estomago; Ella con sus manos me nalgueaba y me sobaba mi ano... Estaba rendida a sus pies... Me volteo otra ves y me abrió de piernas íbamos a hacer la famosa "Tijera" puso mis rodillas hasta mis pezones y empezó a frotarse.-¡Vamos di mi nombre otra ves!, Quiero oírte muriendo de placer por mi, ¡Ah!,¡Ah!-Puse mis manos en mi cara pues moría de placer y vergüenza a la ves, mis pechos rebotaban hacia arriba y hacia abajo como los de ella.-¡Ah!, Caro, lo que tu digas, pero no pares,¡Ah!,¡Ah!. Las dos nos corrimos de tanto placer y acabamos rendidas, ella encima de mi me empezó a besar, pero estaba tan cansada que me quede dormida.

A la mañana siguiente, deperte abrazada por la espalda por ella, totalmente desnudas las dos.

Sabia que desde ese día las cosas iban a cambiar dramáticamente. Solo me cambie agarre mis cosas y me fui a la escuela; pero antes despidiéndome dándole un beso en la mejilla y susurrándole al oído-Nos vemos en la noche Caro-Ahora me tiene totalmente amarrada como su esclava; no se si me alegra que descubriera mi "secreto"; yo no lo veo a mal, pero quizás los demás no lo vean así.En lugar de ser un castigo es mas un placer.