1. Acosado y seducido (3)


    Fecha: 17/02/2020, Categorías: Incesto Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    Lo vi rodearme por la izquierda mirándome y con sus labios curvados en una sonrisa lasciva…
    
    Entonces intenté por última vez resistirme con un ruego desesperado: -No, señor Trovatto, por favor… No me… no me lo haga… Yo… yo no soy gay…
    
    Él soltó su típica risita y me dijo con tono burlón: -¿Ah, no?, pero bien que te gustó chupármela… ¡muy bien me la chupaste, Jorgito! -y ya a mis espaldas me ordenó que me entreabriera las nalgas… Le obedecí temblando de miedo y ganas y me estremecí violentamente cuando sentí la punta de su verga en mi entradita… Gemí cuando el ariete empezó a entrarme y enseguida y tuve que morderme los labios para no gritar ante ese dolor tan fuerte que tuve miedo de que mis pobres nalgas fuesen a estallar en mil pedazos… Pero para mi alivio, ese dolor fue atenuándose poco a poco hasta desaparecer cuando la verga estuvo toda metida y sentí los huevos de mi violador repiqueteando contra mis nalgas… ¡Ay, qué placer tan grande!... Yo gemía y jadeaba y él me humillaba mientras no dejaba de bombear: -Te gusta, Jorgito… Sí, te gusta tragar pija… Te la hice tragar por la boca y ahora por el culo y estás gozando porque sos putito y quiero que me lo digas… -y la verga seguía yendo y viniendo elevándome a cumbres indescriptibles del goce sexual…
    
    -Decilo, Jorgito… Decí que sos putito… ¿o querés que te la saque?...
    
    La amenaza me desesperó y entre jadeos dije: -Soy putito…
    
    Él río y me humilló con una nueva exigencia: -Decí que sos mi putito… O te la saco ...
    ... ya…
    
    -No, señor Trovatto… Por favor no me… no me la saque…
    
    -¡Decí lo que te ordené!
    
    -Soy… soy su… soy su putito, señor Trovatto…
    
    -¡Jajajajajajajajajaja! –y después de la carcajada una eyaculación abundante que me llenó el culo de semen caliente mientras el rugía como un animal…
    
    Fue mi iniciación como putito y déjenme que les cuente cómo siguieron las cosas con Mi Señor… Sí, a partir de esa tarde él es Mi Señor y así me gusta llamarlo… Es Mi Dueño, el hombre que me despojó de mi voluntad y me impuso la suya, porque desde esa tarde es la voluntad de Mi Señor la que rige mi conducta, mis actos y hasta mis pensamientos…
    
    Al día siguiente de esa primera vez volvió a llamarme a su oficina y cuando entré vi que también estaba la señora Eleonora, la Jefa de Personal, que nos envolvió en una mirada sugestiva… “¿Sabría lo que había entre Mi Señor y yo?”…
    
    -Sentate, Jorgito… -me ordenó Mi Señor y me senté junto a la señora Eleonora…
    
    -Señora… -empezó diciendo Mi Señor… -a partir de mañana Jorgito va a trabajar en mi casa… La agencia va a seguir pagándole el sueldo, pero él ya no va a venir… Lo necesito en mi casa para las tareas domésticas…
    
    Me estremecí al escuchar semejante cosa y más todavía cuando agregó: -Va ser mi sirvientita a las órdenes de la señora Chela…
    
    -Mmmmhhh, es brava Chela, te va a convenir portarte bien, Jorgito… -me sugirió la Jefa de Personal…
    
    Ahí ya se me hizo evidente que Mi Señor y la señora Eleonora eran cómplices y yo estaba totalmente en ...
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