1. Sumisa en la calle: Experiencias


    Fecha: 14/02/2020, Categorías: Hetero Autor: CalmaSola, Fuente: CuentoRelatos

    ... primera vez le pareció que no era muy grande, ahora sabiendo donde iba a entrar, se le hizo enorme...
    
    Un dedo esparcía la crema por su agujero haciendo círculos y presionando, intentando penetrarla, pero debido a lo nerviosa que ella estaba, no había forma de atravesar los anillos de su ano.
    
    Sintió una mano en su cara, levantándosela y frente a ella vio a su Amo.
    
    -Relájate o no habrá forma. Si estas tranquila no te dolerá. Confía en mí.
    
    Se lo dijo muy dulcemente y aunque al ver a su Amo frente a ella comprendió que el dedo que intentaba entrar en ella era el del chico, oír la voz de él hablándole como si fuese una niña, la calmó.
    
    Entonces notó que algo la traspasaba por detrás. El dedo había entrado. Al sentirlo, volvió a cerrar los músculos del ano, pero enseguida volvió a abrirlo, con lo que el joven pudo moverlo en su interior mientras el Amo le acariciaba tiernamente la cara y los hombros, como si fuera un cachorro al que había que calmar.
    
    Algunas lágrimas resbalaron por sus mejillas cuando el segundo dedo entro en ella y un pequeño gemido de angustia cuando la penetró el tercero, pero consiguió aguantar. Ya no pensaba en escapar de aquello, sino sólo en complacer a aquel hombre que estaba frente a ella tratando de relajarla.
    
    El chico consiguió follarla con sus dedos haciendo que estos se deslizaran es interior sin dificultad, pero el proceso requiso de unos treinta minutos. En algún momento a ella se le ocurrió que no había nadie en el mostrador ...
    ... cuidando del local, pero en seguida se olvidó de ello.
    
    Cuando menos lo esperaba, notó que los dedos salían completamente y la dejaban vacía.
    
    Su culo estaba abierto y latía debido a la presión que había recibido.
    
    Sitió de nuevo la crema fría. Se lo estaban embadurnando con más cantidad. Aunque aquello calmaba el ligero resquemor que sentía, sabía que era el preludio de que le iban a meter el cono.
    
    -Está preparada.Oyó decir al dependiente.
    
    Entonces su Amo, dejo de acariciarla y se fue para ponerse tras ella. Iba a ser él el que le introdujese el objeto.
    
    La punta blanda fue colocada en su agujero y entró sin dificultad. Pero poco a poco notó como el cono que la estaban metiendo iba llegando a su punto de máximo grosor. Cuando esto sucedió, pensó que la iban a romper, que aquello no entraría. La presión era demasiada. Pero la sensación pasó y le pareció como si su ano lo hubiese succionado. Había entrado por completo puesto que notaba la base contra sus nalgas.
    
    Por dentro estaba a reventar. Cada pequeño movimiento le hacía sentir cada milímetro del cono rozándola.
    
    -Quédate quieta, hasta que tu cuerpo se acostumbre y se amolde a él.
    
    A pesar de la orden. Le era difícil no mover al menos los brazos y las piernas los cuales tenía agarrotados debido al tiempo que había pasado en aquella postura.
    
    El Amo se dio cuenta y entre él y el chico la ayudaron a quedar tumbada bocabajo, de forma que sus extremidades descansaran.
    
    El chico se fue sin decir nada y el ...