1. Amigas de infancia


    Fecha: 19/01/2020, Categorías: Intercambios Autor: oscareduardo, Fuente: SexoSinTabues

    Era un viernes en la tarde, todo anunciaba que el fin de semana iba ser igual que otros tantos, sin embargo una llamada telefónica cambió de manera rotunda los fines de semana rutinarios. Marina , una de las amigas de infancia de mi esposa había regresado al país después de residir mucho tiempo en España. Ese sábado llegaría temprano a la capital y quería que su primer fin de semana en Colombia fuera en nuestra casa. Elsa mi esposa se puso radiante de alegría, hacía mucho tiempo no veía a su mejor amiga, prácticamente eran como dos hermanas , se habían criado en casas vecinas de esas que no tenían divisiones ni cercas y que parecían que fueran una sola casona. Como algo inusual en ella me invitó a tomar esa noche unos tragos. Se veía nerviosa, ansiosa, quería ya tener frente a ella a Marina. La recordaba de joven, era unos dos años mayor que ella y fue su referente para muchas cosas, especialmente en su despertar sexual. En ese entonces Marina ya se había desarrollado y sus senos eran ya grandes y con unos pezones de un rojo intenso. Elsa recordaba cómo ella en su afán de saber las cosas relacionadas al sexo había acariciado esos senos y se había engolosinado tocando sus pezones, recordaba con precisión cómo se habían puesto duros y rígidos al tocarlos con sus manos temblorosas. Y qué decir de su preciosa vagina que recubierta por una fina pelusa dejaba entrever sus labios vaginales y en su parte más septentrional el clítoris adormilado que parecía un pequeño capullito. ...
    ... Sus dedos también lo tocaron y vieron como se ponía erecto igual que los pezones. Esos recuerdos tenían tan excitada a Elsa que pronto su vagina se humedeció como hacía mucho tiempo no le pasaba. Fue al baño y con la excusa de ir a orinar se acarició su sexo . Estaba entrapada , sus líquidos vaginales habían humedecido su panty , decidió quitarse la prenda y se quedó sin ropa interior. Volvió a la mesa y seguimos tomando unas copas, no sé si fue intencional o fue un descuido, pero abrió más de la cuenta sus piernas y su sexo quedó frente mí regalándome una preciosa vista de su pelamen negro y brillante. Ya con mis tragos en la cabeza y con esa concha frente a mí no pude evitar que mi pene se irguiera y que un promontorio en mi pantalón le indicara a ella que estaba deseoso de tener sexo. Se acerco gateando a donde yo estaba, con una lentitud calculada empezó a bajar el pantalón de mi sudadera, tomo mis bóxer y también los bajó dejando frente a su boca mi verga erecta , la tomo en sus dos manos, quedó alelada contemplándola y luego la llevó a su boca, empezó a chupar lentamente, luego empezó a deslizar su lengua a lo largo del miembro viril para terminar en el glande, tomó la cabeza de mi pene y empezó a meter su lengüita en el pequeño orificio de mi uretra, sentí un cosquilleo por todo mi cuerpo. Sus prolongadas succiones empezaron a enloquecerme, un sentimiento salvaje se apoderó de mí y quería penetrarla como un salvaje, quería partir sus entrañas , quería saborear su sexo, ...
«1234...»