1. tia y yo


    Fecha: 24/06/2017, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Soy Francisco actualmente tengo más de 40 y contare la historias que tuve desde mi adolescencia. Soy moreno, ojos café, de 1,82, siempre he sido deportista así que no tengo un mal cuerpo. Cuando tenía 16 años vivía junto a mi madre y su hermana, esta última se llama Jacqueline, era mi fantasía sexual recurrente, en ese tiempo tenía 36, dos hijas nataly de 15 y Jocelyn de 14, soltera, tenía uno que otro amorío, pero nada importante. Poseía un cuerpo exuberante, unas tetas enormes, de 120, no era ni gorda ni flaca y un culo igual de exuberante que sus tetas, debido a su cuerpo, en esa edad a pesar de tener novia siempre terminaba en la ducha masturbándome por algún escote o algún contorneo suyo. Por lo general cuando estábamos solos hacíamos tonterías como molestarnos, nos reíamos juntos, ella me contaba uno que otro chisme, y cuando llegaba de jugar futbol, siempre era típico que me nalgueara y me mandara a la ducha. Yo al igual que ella cada vez que cocinaba pasaba por atrás solo para pasarle mi paquete o molestarla con algo. Un día en que mi madre y mis primas salieron juntas, quedamos solos en casa, estábamos en el sillón conversando sobre mi novia y algún amorío que ella tenía por ahí, mientras yo le miraba el escote y no dejaba de alabar su cuerpo, cada vez que le decía el buen cuerpo que tenia o la suerte de su pretendiente, ella solo sonreía. Pasado un rato en que yo estaba un poco caliente mirando su escote, ella me mira y me dice: ” voy a lavar los trastos antes ...
    ... de que lleguen”, yo solo asentí. Ella se paro y fue a la cocina. Yo la miraba y veía su perfil, las tetas enormes que no paraban de moverse mientras ella limpiaba y su culo que cada vez estaba más empinado, finalmente me decidí y me levante acercándome a ella. Me puse en su espalda y tome un paño junto con un plato mojado, me puse a secarlo y dejarlo a un lado, en cada movimiento de secado mi bulto se metía en medio y rozaba sus nalgas. Ella no decía nada, por lo que tímidamente seguí atrás sin dejar de rozarme con su par de nalgas. Note que cada vez se demoraba más lavando cada plato. Francisco…. Que haces?. Nada, te ayudo, así terminas pronto (no moví mi bulto de sus nalgas solo no presionaba) Ella tomo otro plato como si nada, pero yo torpemente mirando su escote casi se me cae el que tenía en las manos, en el movimiento para que no se cayera, ella se inclinó y yo me hice hacia adelante mi bulto quedo metido entre sus nalgas, por lo que ya sentía lo excitado que estaba (mi pene mide 19 cm). Saque la cadera tratando de disimular, pero me sorprendió que ella no se movió se quedó en esa posición, por lo que me acerque lentamente y comencé a presionar contra su culo, mientras ella seguía lavando vi que el agua estaba mojando su escote, eso me excito aún más, por lo que comencé a besar su cuello sin dejar de presionar mis caderas contra las de ella. Franci…sco…. Para…. Un po…co…- escuche de mi tía mientras yo acariciaba sus caderas y rozaba mi bulto ahora ya rozando todas sus ...
«123»