ESTRENANDO REGALO DE NAVIDAD - Relatos Eróticos

ESTRENANDO REGALO DE NAVIDAD

... interesante”, “estuviste con eso toda la noche?”, “que sentías”, “puedo tomar fotos”, fueron sus expresiones y a su pedido les dije que sí pero con el cuidado respectivo, se inició una pequeña sesión de fotos siendo yo la modelo como siempre.Disfrute encantada mientras me ponía más y más húmeda mientras ellos me veían posando como me lo pedían, mostrando ese regalito en mi colita, me fui quitando la ropa hasta solo quedar con mis botas y el plug, si me tenían a su alcance me daban palmadas en mi nalga, ellos ya no resistirían, sus pollas creo que estaban a punto de explotar apuntando hacia mí, la última foto fue estando de cuatro sobre la cama, se detuvieron las fotos para sentir unas manos en mis nalgas y una polla en cada extremo de mi cuerpo.Apenas sentí ingresar a Cesar él dijo que sentía sabroso como un masaje en la parte superior de su polla, yo sentía como el plug lo hacía y se movía deliciosamente en mi colita, me apretó las caderas mientras le pedía que me lo hiciera más duro y con más fuerza mientras masturbaba a Alfred en el otro extremo, lo único que no me agrado fueron esos gases vaginales que a veces produzco, aunque ellos dijeron que estaban alucinantes. Mientras sentía sus penetraciones escuchaba sus gruñidos de placer, casi al borde de su éxtasis me pregunto si tomaba algo para no embarazarme, le respondí que no se preocupara, entonces arremetió con más fuerza, yo exclamando que “así, así, mas, mas” sentía que vendría casi al mismo tiempo que él, escuche ...

... sus últimos gruñidos mientras se vaciaba dentro de mí, le dije que siguiera hasta que pueda sentir mi propio y primer orgasmo con un plug en la colita, fue de lo más placentero además de pedir más palmadas en mis nalgas.Era el turno de Alfred y con mi mano indique a Cesar que viniera delante mío para limpiar con mis labios su empapado miembro que ya estaba más flácido pero aun sabroso, Alfred me dio unas buenas palmadas en mis nalgas, me las apretó fuertemente como me gusta y procedió a empapar su polla dentro de mi vagina, su miembro tenía cierta curvatura hacia arriba y de la misma forma que Cesar indico que sentía más presión en la parte superior del pene, me pregunto si no me incomodaba, le respondí “tú qué crees?”, me respondió que seguramente yo disfrutaba de formas que ni ellos imaginaban. Después de un momento pregunto “así que te gusta duro?” le respondí que sí y trato de penetrarme hasta donde ya no podía llegar, lleve la mano de Cesar a mi clítoris y junto a esa estimulación mis gemidos se transformaron en gritos de placer, no saben lo cerca que estaba de un squirt pero no llego, sin embargo lo delicioso se mantenía, Alfred se fue directo a los empollones generando ruidos húmedos que los entusiasmaba a ambos y con la estimulación de Cesar me hicieron sentir sabroso de manera continua tanto así que me hicieron venirme dos veces mientras Alfred me llenaba de tanta leche que termine chorreando entre las piernas, aun durante la ducha que me di después, ahí fue donde no ...