1. La Vida es un Sueño Parte 2


    Fecha: 20/12/2019, Categorías: Incesto Autor: ioelmejor69, Fuente: SexoSinTabues

    ... pesar de colgar entre sus piernas, era lo suficientemente grueso como para apenas poder abarcarlo con una mano, era largo, más largo de lo que yo hubiera pensado, sus piernas eran igualmente velludas en todos los muslos y aun bajo las rodillas, todo el conjunto firmemente marcado por músculos claramente definidos, ajusto el agua y se metió bajo el chorro mientras tomaba jabón que empezó a pasar por todo su cuerpo, el sr. Benjamín movió un control que había de lado derecho del cristal y de repente estaba escuchando el ruido del agua y a mi hijo tarareando una canción. Al paso del tiempo y tal vez por el efecto del agua caliente, empecé a ver como el miembro de mi hijo crecía, cuando paso el jabón por sus testículos, pareció engolosinarse en la caricia y su herramienta creció mas, la tomo en sus manos y empezó a sacudirla con ritmo en toda su longitud, seguía creciendo su barra estaba tomando la posición horizontal, la veía tan cerca que parecía que me la estaba poniendo más a mi alcance, surgieron en mi deseos de tocarla, el sr. Benjamín, se puso de pie y salió de su cuarto, al pasar junto a mí me dijo: -¡Es hermoso! ¡Disfrútalo! Salía ya de la habitación cuando mi hijo decía: -¡Mama, mama! Al fin juntos, su mano sacudía su ahora totalmente erecto miembro, la piel del prepucio cubría y descubría el glande en tan bella forma que resultaba harto antojable, su bulbosa cabeza se tornaba más obscura momento a momento, se puso de un color azul previo al momento de salpicar su ...
    ... derrame sobre el cristal, tres o cuatro chorros resbalaban por la superficie, se me antojo tocarlos e instintivamente moví mi mano para tocarlos, lo acompañe en su gozo cuando con mucha intensidad volvió a decir: -¡mama, mamita, mamita!. Me quede inmóvil por la impresión, lo había escuchado y aun no comprendía que mi hijo tuviera esos deseos por mí y que lo llevaran a masturbarse, claro, era joven, un cuerpo sano, por más que pensé, no me quedaba claro que a lo largo de los años y solo con contactos dominicales, mi hijo desarrollara sentimientos así por su propia madre, vi como empezaba a secarse y Salí rápidamente para que me encontrara cerca de las recamaras, al escuchar sus pasos supe que venía y fui a encontrarle, tenía la toalla sujeta a la cintura, ver de cerca su cuerpo casi me hace desmayar, me abrazo, su abrazo ahora me provoco suspiros y subir mi temperatura, le dije que lo esperaría con el sr. Benjamín. Alberto llego enfundado en unos pantalones nuevos y una playera modernista que había seleccionado esa misma tarde, venia descalzo, también había olvidado comprar pantuflas. Cuando los vi platicando del futbol y empezando el programa deportivo, me despedí y les dije que estaba cansada y habían sido muchas las emociones del día. Me encerré en mi nueva recamara, tan pronto me sentí segura, baje mi falda y revise mi ropa interior, estaba más que húmeda, mojada sería más propio, aun mi centro de placer mostraba los labios abiertos y dispuestos, mi clítoris sobresalía ansioso ...
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