1. Venancio, el viejo tendero 5.


    Fecha: 09/12/2019, Categorías: Gays Autor: chichos91, Fuente: SexoSinTabues

    Estábamos a jueves, y desde la semana pasada no había vuelto a ser follado por el viejo Venancio; lo único que pude hacer fue una felación a Marcos, donde le tuve que tragar todo el semen; eso había sido el lunes a la noche; lo habíamos hecho en los aseos del bar. Ese jueves parecía que había bastante marcha, ya empezaba a ser la hora de cierre del bar, y además del viejo tendero y yo, todavía quedaba una pandilla de 5 estudiantes; 4 eran universitarios, y otro empezaría ese año, ya que había aprobado la selectividad; no hacía mucho que habían entrado; venían de una fiesta universitaria, o botellón; no les entendí bien; al parecer eran conocidos de Marcos, el camarero. En una de las ocasiones en las que fui al aseo, entró Marcos, y después de magrearme el culo, me dijo que esa noche no me fuera que íbamos tener fiesta. Ya había avisado al viejo Venancio y que este estaba de acuerdo. Cuando salí del aseo, fui para la mesa donde solíamos ponernos, y luego de sentarme yo, vino el viejo Venancio, sentándose a mi costado. Dejó que Marcos ocupara el sitio que estaba enfrente de mí. Allí al menos dejó su copa Marcos, mientras atendía a los chavales, e iba limpiando y recogiendo poco a poco, para cerrar en cuanto pudiera. Ya habían pasado unos 40 minutos cuando aquellos chavales se iban del bar; eso fue lo que yo pensé, que se habían ido los 5, pero había quedado uno de ellos; era el más jovencito, era el que se había examinado de selectividad; y yo no me había dado cuenta de ello. ...
    ... Marcos les abrió la puerta que ya se encontraba cerrada, una vez salieron, volvió a cerrar la puerta, y ahora sí, bajó las persianas para no ser vistos desde fuera. Luego ocupó su puesto en la mesa. El chaval que había quedado estaba en otra mesa que quedaba enfrente de la nuestra, pero a la otra parte del bar, cosa que yo no sabía, y es que con el ruido de la película que estaban Echando, y lo silencioso que estaba aquel chaval, yo no me había enterado. Volví a ir al servicio a mear. Cuando estuve de vuelta a la mesa, me agarro Marcos por la cintura, empezando a meterme mano e intentar desabrochar el cinturón del pantalón, cosa que llevó a cabo, para luego empezar a desabotonarme el tejano Levi's que llevaba puesto. Tan pronto hubo desabotonado el primer botón, este ya me empezaba a caer; había adelgazado bastante, y el pantalón que llevaba puesto ese día, sino era sujetado por el cinturón, se me caía el solo; cuando quiso desabotonar el segundo botón, ya tenía el pantalón por debajo de las rodillas. ¡Joder ciego, tu pantalón parece que tiene prisa por dejarnos ver tu culito! Tiró del slip para abajo, y ambos cayeron a la altura de mis tobillos. ¡Hostia ciego! Ya estás bien empalmado. Empezó a menearme la polla con una de sus manos mientras con la otra la subía por el pecho, levantándome la camiseta que llevaba, y acariciar y pellizcarme los pezones. Dejó que el viejo Venancio se apoderara de mi polla y huevos, mientras él me sacaba la camiseta, dejándola una vez me la hubo ...
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