1. MI EX RECLUSO 4


    Fecha: 21/11/2019, Categorías: Gays Autor: astarnet, Fuente: SexoSinTabues

    Regresamos a casa después de comer y caminar un poco. Marco comentó – Dios que Cansado estoy, creo que ahora si necesito un baño y darme una siesta. Juanjo comento - yo aprovecho para ir a llevar la 4x4 a que le hagan el cambio de aceite y revisen las llantas, hay que aprovechar el puente festivo, deberíamos de llevar a Marco a la playa o algún pueblo pintoresco para que conozca. Juanjo se despidió de mí y me dio un beso en los labios y otro en la mejilla a Marco. Yo aproveche para meterme en mi oficina y revisar algunos pendientes. Estaba muy concentrado cuando escuche que alguien grito mi nombre y supe que era marco, subí a la recamara de huéspedes y no lo vi, en eso marco volvió a gritar mi nombre y supe que venia del baño de su recamara, entre y ahí estaba. Totalmente desnudo, con los ojos cerrados tratando de retirar el agua de su pelo. Era un verdadero espectáculo un cuerpo esbelto masculino, de esos que se forman con el trabajo duro del campo. Pero sobre todo lo más imponente era la enorme polla semi erecta que le colgaba y escurrían hilitos de agua, era realmente más grande y gruesa como la de Juanjo. Tenía un vello espeso castaño claro que cubrían todo su pecho hasta llegar a unirse con el de su pubis. Unas piernas largas e iguales de velludas que su pecho. Abrio los ojos y me dice – Pablo, disculpa mis gritos, pasa que olvide pedirte una toalla. Me podrías facilitar una? A lo que yo con pena y nervios le dije- si claro que si. Salí del baño de huéspedes y regrese ...
    ... con dos toallas, las más grandes de me encontré. Pablo seguía ahí inmóvil dentro de la regadera, pero esta vez su erección estaba al 100% era imposible disimular y no verlo, aquella polla era enorme y morbosa. Marco me vio impactado y sonriendo me dijo – Ya lo vez te dije que era más grande que la de mi hermano, justamente son 21 cms de carne de macho para el que la quiera comer. Yo me hice el desentendido y le entregue las toallas, al entregárselas me sujeto una mano y me la coloco sobre su enorme moustro de carne diciéndome – No le tengas miedo conócela, no pasa nada. Saque mi mano, me di la media vuelta y Sali del baño. Dentro de mi sentía una extraña mezcla de deseo y respeto, como algo prohibido. Y sabía que era un juego peligroso en el que ponía en riesgo mi relación. Regrese a mi oficina y paso un rato, me dije a mi mismo - quizás ya se ha de haber dormido Marco, y justo en ese momento entra marco con la toalla en la cintura aun desnudo pero olía rico, fresco. Trate de no ponerle mucha atención, a lo que el me pregunta – Pablo y que lees?. le respondí que leía un caso de un cliente. Y me dice – cuéntame de que trata tu caso quizás me podrías ayudar mucho. Se coloco a un lado de mi silla y mientras yo le explicaba un poco del caso, el me regalaba unos repegones en el brazo con su aun semi erecto pollon y al ver que yo no respondía a sus insinuaciones. Opto por sentarse en mi escritorio de madera con las piernas abiertas dejando entrever lo que le colgaba. Tomo mi mano y ...
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