Cogida en el estacionamiento de mi trabajo - Relatos Eróticos

Cogida en el estacionamiento de mi trabajo

Eran casi las 6 de la tarde la oficina estaba ya vacía, yo estaba terminando de acomodar mis cosas porque ya también me iba a casa (ese día vestía como siempre bien puta con un coordinado de bra y tanga en color rojo, un vestido corto, escotado y zapatillas) baje al estacionamiento y solo estaba el conserje del edificio, me saludo muy amablemente como siempre y abrí mi coche para acomodar mis cosas en la cajuela, al hacerlo me incline un poco y por lo corto de mi vestido este se me subió aún más y sentí que se me veía la tanga y por ende mis nalgas, sentí la mirada del conserje pero no hice el menor esfuerzo en taparme, todo el día había estado cachondeándome con mi jefe y la verdad aun me sentía cachonda y muy caliente, así que no me importo que el conserje me viera las nalgas, y con toda la intención de darle una buena visión me tarde un poco más acomodando mis cosas y pare aún más las nalgas y separe las piernas, así como estaba tenia frente a mí el espejo retrovisor del carro por lo que podía ver que hacia el conserje, y note que se agarraba y acariciaba la verga por encima del pantalón sin dejar de verme, esto por supuesto a mí me puso aún más cachonda de lo que ya estaba y se me antojo la verga del conserje, me imagino que en ese momento él ya estaba igual o más caliente que yo, y supongo que decidió jugársela y haber que pasaba por que vi cómo se fue acercando hacia a mí, yo hacía como que no lo veía y seguía en lo mío así empinada y parando el culo en la cajuela del ...

... carro, lo sentí muy cerca de mí pero no hice el menor esfuerzo en voltear a verlo ni para decirle algo, el tomo la iniciativa y acercándose a mí me dijo ay señora Karina discúlpeme lo que lo voy a decir, pero viéndola así ya no aguanto más, está usted muy buena yo para entonces estaba que ardía y quería tener su verga dentro de mí, ahora sé por qué su jefe se la anda cogiendo y usted le da unas mamadotas de verga que quisiera ser yo en esos momentos, yo estaba que no podía ni hablar de lo cachonda que estaba, así que el sin decir más y así como estaba con las piernas abiertas y parando el culo se acomodó debajo de mí y comenzó a chuparme la panocha por encima de la tanga, me dio varios lengüetazos deliciosos poco después solo hizo de lado mi tanga y comenzó a chuparme la panocha de una manera por demás deliciosa y en cuestión de minutos ya me tenía gimiendo y aullando de placer y diciéndole que siguiera que me estaba matando de placer que lo hacía delicioso y pidiéndole que no parara.

Me hizo tener un orgasmo riquísimo que hasta las piernas me temblaban, entonces me di la vuelta y él se paró, nos besamos mientras con mis manos le desabrochaba el pantalón y comencé a acariciarle la verga y el con sus dedos jugueteaba con mis nalgas y mi panocha, saque su verga y me agache para comenzar a chupársela, el tomo mi cabeza y la acariciaba mientras yo chupaba su verga y me decía ahhhh que rico mamas perra, que rico te la comes puta asiiii trágatela toda putaaaaa, después de un rato ...