1. Mi prima lejana en el baño de Starbucks


    Fecha: 14/10/2019, Categorías: Confesiones Autor: Dana Lao, Fuente: CuentoRelatos

    ... puso un short corto que me permitía tocar sus piernas cuando las subió sobre las mías, mientras disfrutábamos en la terraza de nuestro café. Pero la lluvia, nos obligó a entrar para no mojarnos y terminamos el café en la barra.
    
    El local estaba vacío por la lluvia, a excepción de una parejita al fondo que se comía a besos. Conforme bebíamos el café, yo volví a tocar sus piernas y con mi dedo pulgar me fui acercando un poquito hasta su vagina y apenas la rocé lentamente para luego seguir mi camino por sus piernas. Ximena soltó un suspiro y en seguida fue a besar mi cuello, luego mi oído y finalmente terminamos el café y me pidió que la acompañara al baño.
    
    Nos lavábamos las manos, cuando ella me acorraló hacia la pared con un beso profundo e intenso y sin más, metió una de sus manos bajo mi blusa. Eso me calentó y por encima de la ropa toqué sus tetas y las apreté.
    
    En seguida abrió el cubículo a sus espaldas y entramos, nos seguimos besando intensamente y tocándonos sobre la ropa hasta que levante su blusa y saqué una de sus tetas del sostén para comerla. Ella muy agitada por la excitación, tomó mi mano derecha y la introdujo en el short y la tanga, y pude sentir su vagina mojada y deliciosa. No parábamos de besarnos.
    
    Después, me desabrochó los jeans y me los bajó con todo y tanga hasta el suelo, yo acerqué mi vagina a su pierna para que sintiera mi humedad, lo cual la excitó mucho. Ambas estábamos muy mojadas, por lo que mis dedos pudieron penetrarla con facilidad y sin dejar de besar su boca, comencé a meter y sacar mis dedos de su vagina, mientras frotaba mi vagina con su pierna. Nuestras bocas solo dejaron de besarse para que ella me dijera "que rico te mueves" mientras me rasguñaba la espalda y las nalgas con sus uñas pintadas de rojo y mis dedos seguían penetrándola.
    
    Terminamos al mismo tiempo y con sus jugos en mis dedos y los míos en su pierna, volvimos a acomodarnos la ropa, para salir del baño y del local. Había terminado de llover.
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