Qué bonita familia... - Relatos Eróticos

Qué bonita familia...

Y aquí se desarrolla todo cuanto pasó. La invité a mi casa y estar tranquilos con un café. Pasaron 2 horas qué jamás se sintieron, y ya casi daban las 10 de la noche, y se despidió de prisa. Al día siguiente Yo tenía un compromiso de trabajo, así que me levanté más temprano, salí al patio para encender el boiler y vi la luz del patio de Lupita, el muro que divide los patios es muy bajo, nunca pensé que alguien me vería o Yo poder ver a alguien. salí con una toalla a la cintura, cuando escuché que la puerta de la cocina de Lupita se abría, al mismo tiempo por extraña coincidencia mi puerta se cierra. busqué agacharme tras el lavadero, y en eso sale mi vecinita cubierta con tan sólo una playera corta, con las nalgas de fuera, Wow. qué cosotas tiene. de Campeonato. en esos momentos Yo tenía ya una Mega Ereccion. La estuve observando. cada vez que se agachaba sus nalgas se abrían mostrando su Rica Panochita. Pero la verdad el frío me tenía congelado. pensé cómo le iba a hacer para abrir mi puerta. Cuando Ella me brinda la oportunidad al entrar a su casa. salgo corriendo de mi escondite y sale Ella también, nuestras miradas se cruzaron, y ambos nos recorrimos observándonos con atención. La saludé nervioso, y mi toalla se fue al piso. me observaba la verga parada y se recargó en los codos sobre el muro. Vi un poco aterrado cómo pasó la pierna de este lado, y en un tris la tenia a escasos 10 centímetros de mi cuerpo. Me puse en Extremo Nervioso. la miré a los ojos y sólo acerté ...

... decir; No tengo cambio. Ella torció la boca y fruncio las cejas, bajó la mano apretando mi verga, y. Qué DELICIA. Me masturbaba con suavidad y firmeza. frotando su panochita con mis huevos, Tomó mis manos y las condujo a sus nalgas. Fue tan sólo cuestión de levantar su cuerpo y la penetré con infinito deseo. Ignoro qué tiempo Pasamos así cojiendo entre besos, caricias y mamadas Nos venimos al menos en 2 ocasiones cada uno. y nos metimos cada quien en su casa. . Pasaron 3 días y nos saludamos cómo si nada, pues venía con su hijo Gustavo, quien me dijo que si era posible ayudarle con sus clases de Matemáticas, y quedamos de vernos al otro día, ya por la tarde, Gustavo tocó la puerta y lo pasé. en sí no tenía en orden sus temas, y los fuimos acomodando poco a poco. una vez ordenados, comenzó el estudio, perdimos la noción del tiempo, ya daba la 1 de la madrugada, entonces le dije que llamara a su casa para que le abrieran la puerta. pero nunca contestó nadie. entonces arrimé unas cobijas y le tendí el sofá, le ofrecí un café y merienda y charlamos otro rato. después me retiré a mi recámara y lo dejé en el sofá, No había pasado ni la hora, cuando Gustavo tocó mi puerta, entró diciendo que hacía mucho frío en la sala y deseaba dormir en mi cuarto, Yo estaba totalmente desnudo apenas le iba a decir que me permitiera acomodar la cama en lo que me hacía favor de traer agua, pretexto para que no se diera cuenta de mi desnudes, Pero jamás me dio oportunidad. Entró en la cama y se tapó ...