1. Muchas putas


    Fecha: 08/10/2019, Categorías: No Consentido Autor: tanga_de_tarzan, Fuente: CuentoRelatos

    ... blanco de deleite carnal.
    
    Le levanté de estar en esa postura y se arrodilló ante mi para comenzar a tragar y lamer mi rabo que se estaba empezando a poner duro
    
    β€” ¡vamos, zorrita!, ¿quieres probar mi polla? β€” inquirí lascivamente
    
    β€” ¡si, cabrito, si! β€” afirmó con rotundidad sexual Adrianna
    
    Adrianna se tragó mi rabo y yo le empujé la cabeza hasta mi pierna y yo miraba embelesado y fascinado como esta depravada guarrita de Adrianna tenía en su cavidad bucal mi rabo
    
    β€” ¿te gusta mi polla? β€” pregunté excitado
    
    β€” ¡muy grande, cabrón! β€” exhaló Adrianna dejando su boca cerca de mi rabo, todo mojado por sus lascivas babas
    
    Yo la golpeaba y atizaba en sus morros con mi enhiesta pero dura verga y ella abría su hambrienta bocaza de fulana para tragar y engullir otra vez mi duro rabo
    
    La muy puerca hizo aparecer su deseosa lengua en sus fauces y le empecé a asestar sacudidas en su lengua con mi carnal jabalina. La muy cerda, se levantó un poco, agarré con fuerza su bocaza y la empujé para que devorara toda mi verga de macho que celo, que tanto gozo me estaba dando esta puta fulana
    
    β€” ¡vamos traga, zorra!, ¡engulle, puta!, ¡tragatela, guarra! β€” ordené con furia a esta zorra de Adriana
    
    Agarraba con fuerza el cabezón de Adrianna que tenía bien abierta su puta bocaza y tragaba y engullía en nonstop mi dura verga de macho en celo hasta casi atragantarse, `pues notaba que casi casi tocaba su campanilla con la punta de mi brutal cipote
    
    Después de estar en esa ...
    ... brutal postura hasta casi ahogarse, la separé de mis piernas y la muy puta se subió la blusa para mostrarme mas las tetas y la agarré con firmeza de sus dos coletas para volver a recomenzar las acometidas de su lasciva bocaza de zorra en celo hacia mi polla que ya estaba dura y bien pringada de sus babas de puta puerca.
    
    La cerda engullía y deglutía mi duro rabo y me miraba casi con pena y a mi me daba igual, porque ambos buscábamos un mutuo placer y el de ella era el darme goce y deleite con su bocaza de fulana tragona. Cuanto mas verla sufrir y como engullía mi rabo, mas cachondo me ponía, pues sabía lo puta cerda que ella se sentía y lo feliz que estaba de tragar mi gordo rabo de semental.
    
    La atraje mas y mas hacía mi, hasta casi atragantarse y atracarse con mi gorda verga en su caliente bocaza y veía que lo pasaba muy mal pues no la dejaba respirar por la boca y eso me ponía muy burro
    
    La volví a separar para que respirara un poco y la tumbé en el amplio tresillo, bien abierta de patas para estacarla con mi rabo y joderla bien y a gusto
    
    β€” ¡es muy gorda y grande tu polla, cabrón! β€” resolló Adriana entre gemidos
    
    La abrí bien de patas y comencé a horadar, perforar y punzar con mi rabo en todo su coño al tiempo que con una mano la agarraba de la cabeza mientras chillaba de lujuria
    
    β€” ¡si, cabrón!, ¡dame mas!, ¡hijo puta! β€” vociferaba Adriana de placer.
    
    β€” ¡ahora te vas a clavar este consolador en todo tu coño hasta que sientas hasta la punta! β€” sometí a ...