condiciones calientes - Relatos Eróticos

condiciones calientes

... segunda vez anterior, le dije que lo agarre, pero el me sorprendio, me pregunto si no haríamos la condición, lo pensé segundos, note que estaba mas que dispuesto, asi que me levante, puse llave y regrese con el, disfrute su mirada mientras me quitaba las ropas, quedando desnudo, me acomode igual que esa tarde, sin pedírselo sujeto mi verga y comenzó a moverla, en poco tiempo la tenia como piedra, se sonrojaba conforme lo hacia, me puso tan caliente, que le pregunte si quería jugar otra condición, apenas lo pensó, asintió, despacio le quite las ropas, dejando solo su playera, su pequeña pijita estaba erecta, señal que sus calentura estaba alta, lo puse de espaldas y acomode sus preciosas nalguitas carnosas y blancas, encima de mi erección, comencé a moverlo, frotándome en ellas, no ponía resistencia, viendo que estaba tan caliente como yo me acomode en la cama recostado y lo hice montarse de espaldas a mi, mirando como mi verga erecta y jugosa quedaba atrapada en su rajada del culo, le mostre como debía moverse, oia su agitada respiración, en pocos segundos se movia solo, sus mejillas ardían de color rosa, se veía hermoso, no se cuanto tiempo paso, cuando gozas parece un suspiro, eyacule mojando mi abdomen y sus nalgas, el concentrado en las sensaciones no dejaba de frotarse, cuando quise detenerlo, el mismo pidió que un poquito mas, lo deje seguir, consiguió mantener mi erección, estaba temblando igual y mas que yo, se sacudió presa de su brama, imagino que tuvo algo ...

... parecido a un orgasmo, ya caliente, lo cambie de posición, colocando una almohada debajo de su abdomen, abriendo completamente sus piernas, abri sus nalgas y puse mi verga en su rajada, segui masturbándome, el buscaba la manera de mirar aun que luego cerraba sus ojitos presa del placer, excitado como nunca antes, vi su tierno agujero, usando mis jugos como lubricante, le meti un dedo, se retorcio de dolor y placer, lo dedeaba mientras me masturaba despacio, se dejaba hacer lo que yo quisiera, minutos despues logre meter otro dedo, deleitado con sus quejidos y gemidos, cuando considere que estaba listo, se lo saque despacio, me acomode, puse mi glande en su entrada, sujetando mi tranca, empuje, hasta penetrarlo, solto un quejido, le dije en voz baja que si nos descubrían nunca mas jugaríamos se quedo calladito, empujaba despacio, deleitándome con su estrecho y virginal ano, su recto se abria a mi empuje, lo dejaba reposar y seguía, no pare hasta conseguir meter mi verga completa, casi lo logro apenas unos dos centímetros quedaron fuera, despues de dejarlo reposar, comencé a sacar y meter, que brutal placer, escuchándolo quejar ahogado entre mis sabanas, no se cuanto tiempo paso, ni me importaba en ese momento, lo sujete de su breve cintura y me cogia como si fuera una chica mas, con la diferencia que el placer de lo prohibido dispara los sentidos, entre jadeos le hablaba al oído, cuando estaba por estallar le dije que le daría su primera leche, que su culo era mio solamente, se lo ...