1. ABRIL


    Fecha: 04/10/2019, Categorías: Erotismo y amor Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... moverse de nuevo. Fue fantástico tocar la piel suave de aquellas magnificas curvas traseras de Eli, notar su culo duro moviéndose revitalizó mi pene haciéndolo más grande y duro, ella lo notó y bajo un poco el ritmo para adecuar su coño al nuevo tamaño, con los ojos abiertos me miraba y sonreía mientras mantenía la suave velocidad de las envestidas ,-eeehh, yo había pensado en soltarme un poco para agarrarme a sus tetas pero la rápida llamada de atención hizo que cogiera su culo con más fuerza y le diera una palmadita,-aaahy,-que pasa no te gustan los cachetitos, -auuu, si mucho, me encantan , pero ahora solo quiero follar. Empezó a subir el ritmo de forma desenfrenada, yo notaba mi polla cada vez más dura, disfrutaba como un loco, - voy a hacer que me llenes el chocho de leche, subía el ritmo a cada movimiento, -me queda poquito para explotaaaar, decía otra vez gritando. Sin parar de menarse se inclinó un poco hacia delante haciendo que mi glande rozara más contra las paredes de su raja, ...
    ... estaba inundado de placer y yo también empecé a gritar. - oooh, que gustazo me daas, muévete, muévetee. Ella fue capaz de subir el ritmo mientras decía. - Correteé conmigo, cariñooo. -siii, gritaba yo. - ahora, ahoora, yaaa. Sentí la brutal explosión de mi semen y las contracciones en lo guebos a la vez que los espasmos en su raja y el frescor húmedo de su eyaculación. Esta vez gritamos juntos al unísono, unidos por la magia de uno de los momentos más placenteros de nuestra vida.
    
    Eli, estaba rendida. No pudo despegarse de mi cuerpo., durmiéndose encima mientras me besaba, yo disfruté un ratito tocando su cuerpo, pero también caí.
    
    Las gaviotas revoloteaban por encima de los mástiles en los veleros que salían a pasear un día esplendido de abril. El perro vino de atrás, pego un salto y se subió a mi pierna saludando.
    
    Ambos nos dimos la vuelta y empezamos a reírnos junto a la niña que nos miraba con sorna, disfrutábamos del precioso día mientras oker corría por la arena de la playa. 
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