-
Me llenaron de leche por todos lados
Fecha: 04/10/2019, Categorías: Microrelatos, Autor: Lolisex, Fuente: CuentoRelatos
Luego de que me fue mal con mi examen de matemática. Decidí empezar clases de apoyo. Como me gusta comprarme ropita y salir de jodida me cuesta gastar dinero en clases. Aunque sé que es importante. Por suerte tengo un tío que anda muy bien y está muy bueno jajaja. Le pedí que me diera una mano a lo cual accedió. Quedamos para el viernes a la tarde. Mi tía no estaba ya que se encontraba de viaje laboral. Algo que yo ya sabía. La verdad es que estaba media calentita y quería obviamente algo más. Como sabía que me iba a costar romper el hielo ya que es mi tío Fernando. Me tome una pastilla que me recomendó Naty. A los 20 minutos estaba 10 veces más caliente de lo común. Fui al ropero y busque un buen conjunto de ropita interior sexy. Medias de red portaligas, un bóxer caladito un corset traslucido atrás y calado por delante que me apretaba las tetitas haciéndome parar los pezones. Todo negro para que me resalte mi piel blanca y el color rojizo que me hice hace unos días en el pelo. Me maquille un poco y me puse un vaquero una blusa y tapado que esconda todo mi calienta macho. Golpeo ya haciéndome la idea de todo lo que le iba a chupar a mi tío Fernando si me lo permitía. Para mi sorpresa cuando me abre veo que hay 3 alumnos más. Me siento y empezamos a charlar y conocernos un poco. Re buena onda los tres. Pasado el rato paso al baño y me empiezo a hacer la cabeza de llamar a mi tío y que me coma toda. El morbo de que los demás estén afuera ...
... más ganas me daban. La pastilla ya me tenía mojadita mi conchita. Me fui al patio a refrescarme un poco y fumar un cigarrillo. Al ver que demoro mi tío sale y me pregunta si estoy bien. A lo cual le respondí que no. -Tengo ganas de hacer algo que está mal. Quiero hacer el amor con vos. Mi tío quedo petrificado. -Te juro que no se lo voy a decir a nadie porfi. Se puso nervioso y atinó a irse a lo cual yo no lo deje. Lo abrace y le pedí perdón y le prometí no hablar más de aquello. Entramos nuevamente y mientras hacíamos ejercicios empecé a coquetear con Gastón. Morocho de 24 años no muy corpulento pero luego supe que tenía una verga enorme y rica. Mi tío empezó a ver esa situación y que charlábamos mucho lo cual le molestaba un poco. Tanto que en un momento se paró corriendo la silla como enojado y se fue a la cocina. Me pare y le dije al oído a Gastón “voy por agua para enfriarme un poco”. Gastón quedo como loco y quedaron cuchicheando los tres. Llegué a la cocina y le dije: -tío te pasa algo conmigo. Estás enojado? -Si -me dijo- Estas restregándote con Gastón. Que es lo que querés de mí. -Y me agarro fuerte. -Sabes lo que quiero tío. Acerque mi cara a la suya y él no se corrió. Toque su bragueta y suspiro muy fuerte. Sin sacarle la mirada desprendí su pantalón y le agarre la verga. -ay Loli nos vamos a meter en líos. -Méteme todo lo que quieras y donde quieras -le respondí. Le saque las manos de mis hombros y me arrodille rápido ...