"EL" En una Prisión - Relatos Eróticos

"EL" En una Prisión

... hicieron gym Leer eso me dejo peor, senti la necesidad de verlo y decidí ir a visitarlo, el martes siguiente fui pero no me permitieron pasar ya que me dijeron que solo habia visita conyugal, fue entonces cuando entendí por qué se rieron varios gurdias al verme hacer la cola para ingresar sin fijarme que solo habian mujeres, como no pude pasar le pague a otro recluso que un guardia llamó para que le pasara una nota donde le pregunté como estaba, que me dijera lo que necesitaba y que se cuidara mucho, EL respondio a mi nota y decia que estaba bien y que regresara el sabado que habia visita general y asi lo hice, el viernes siguiente le encargué a un amigo que tiene un restaurante que me preparara siete platillos de lo mejor ke supiera hacer, alquilé un carro con chofer y el sabado por la mañana regresé a la carcel que estaba a casi una hora de la ciudad donde vivo, llegué y al ingresar me revisaron hasta destras de la orejas para luego hacerme olfatear de un perro que casi me tumba al poner sus patas en mi pecho y luego revisaron mi carga, pase con normalidad. Cuando llegue a su celda guiado por otro recluso al que tuve que pagarle, EL me recibio con un gran abrazo y en ese momento sentí algo que jamas habia sentido, no tenia nada que ver con el amor pero fue como si el tiempo se congelara los pocos segundo que duró ese abrazo, salude a los demas y les entregué la comida, cosa que todos agradecieron diciendo que ninguno de sus amigos habia llegado y que no esperaban mi visita ...

... por el poco tiempo que teniamos de conocernos. Terminaron de comer y uno de los hermanos de EL les dijo a todos que lo acompañaran al patio y nos dejaran solos que teniamos mucho de que hablar, todos obedecieron dejandonos solos a los dos en aquella celda tan sucia y estrecha que me provocaba asco pero tambien me exitaba mucho estar en un lugar asi con el hombre que tanto deseaba. Al vernos ya solos lo miré fijamente a los ojos y solo atine a darle otra abrazo, EL correspondió y tambien me abrazó muy fuerte, mentiria si les digo que fue un abrazo apasioando, mas bien fué un abrazo de amigos, de esos que uno da para decir cuenta conmigo. A pesar de todo no habia perdido su sentido del humor y me dijo en broma que si en la visita anterior me hubiera puesto un vestido seguro pasaba, los dos reimos con eso, hablamos un rato mas y me dijo que le dolia mucho el cuello, que los colchones de esa celda no se parecian en nada a los suyos, yo me coloqué detras suyo y le di un masaje para aliviarlo, EL tenia una pantaloneta muy fina y pude darme cuenta de que tenia una erección, aproveché la situación y le pedí que se acosatara, el accedió y comencé a masajear sus piernas, subi su pantaloneta y quedaron expuestas ante mi sus piernas blancas y gruesas, las masajeaba suavenmente, decidí ir un poco mas allá dandole un beso en las piernas, EL solo sonrreia y levantó su pelvis para quitarse la pantaloneta y quedar solo en boxers, me pidió quitar mi camisa y lo hice, con la punta de sus dedos ...