1. Mis mejores vacaciones


    Fecha: 16/09/2019, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Me llamo Carmen, tengo 18 años que hice en Marzo. Lo que quiero contar me pasó en verano y creo que desde entonces mi vida ha cambiado tanto, que no la concibo sin volver a visitar a mi tío al menos una vez al mes. Todo empezó cuando estaba de vacaciones con mi amiga Nerea, por el sur. Recordé que mi tío vivía cerca de allí, él se había instalado cerca de la costa para poder estar tranquilo en su nueva vida. Siempre había tenído una relación muy buena con él, pero llevaba más de tres años sin verle. Lo cierto que un día le mande un washap a su tf. Pedí ir a pasar unos días con mi amiga y mi tío no tardo en contestarme, dijo que no le importaba y que además sería para él un placer el tenernos en su ático los días que quisieramos. A Nerea le conté cosas, he de confesar que algunas de ellas un poco exageradas. Lo que sí le dije que era muy guapo y muy varonil, que estaba muy bueno y lo describí fisicamente. A Nerea se le hacía la boca agua, reía nerviosa, porque yo sabía que a ella le atraía mucho los hombres así. Nerea es muy guapa, es una niña fascinante, con grandes ojos, mirada picarona; siempre suele salirse con la suya. Tiene una sonrisa que te imnotiza. Su pelo largo, igual que el mío, muy largo. El suyo rubio natural, su cuerpo es una delicia con pechos grandes y cintura estrechita. La verdad es que es una muñequita. Pero bueno, yo tampoco estoy nada mal. Tengo menos pecho, pero mi culo vuelve loco a los chicos.
    
    Recuerdo que cuando llegamos a la estación de autocares ...
    ... estaba con un nudo en el estómago que no podía ni respirar. Nerea me agarró la mano y bajamos del bus. Allí estaba mi tío esperando, siempre tan masculino, su presencia de hombre duro me impactó. Estaba aún mejor que la última vez que le había visto. Se acercó a nosotras y me lancé a él. Pude notar mis pezones en su duro pecho y el roce hizo que se pusieran más duros de lo que ya los tenía. Presenté a mi amiga que estaba ensimismada. Mi tío cogió las maletas que llevabamos y las metió en su coche. Nos dirigimos hasta su ático. Una vez allí nos enseñó nuestra habitación y nos invitó a salir un rato por el paseo junto a la playa.
    
    Nerea y yo ibamos delante, ya que mi tío se había parado con unos vecinos y nos dijo que siguieramos, que él nos alcanzaría después. Nerea no tardó en hablar de él.
    
    _ joder está buenisímo tía.
    
    _ Ya pero no olvides que es mi tío, así que controlate. -dije riendome con ella sin parar.
    
    Finalmente después de una charla muy caliente, llegó mi tío. Nerea y yo estabamos excitadísimas y sin querer empezamos un juego, coqueteando con él. Después de tomar unos vinos, volvimos al ático, creo que el pobre no aguantaba más y necesitaba desahogarse. Lo pusimos tan cachondo que creo que estubo con la polla dura todo el rato. Solo jugabamos coqueteando, mostrandonos, sin más. Pero eso vueve loco a cualquier hombre. Y si son dos chicas guapas y alegres como nosotras entiendo que mi tío estuviera así.
    
    Se fue a la ducha y nos dejó en la terraza tomando un ...
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