1. Mi nacimiento y evolución en el sexo IV y epílogo


    Fecha: 09/08/2019, Categorías: Incesto Autor: argamedon40, Fuente: SexoSinTabues

    ... fuera pero yo quería mas, así que sacando mi mano de su coño, la llevé a mi cintura, me solté el cinturón y me abrí el pantalón para que su mano tuviese mas facilidad de entrar y jugar con mi herramienta. Ella lo entendió a la perfección, porque automáticamente metió su mano por debajo de mi calzoncillo y agarro mi verga, acariciándola al principio y meneándola después, me estaba masturbando. Yo volví a lo mío y le metí la mano donde antes, estaba aun mas húmeda, le metí un dedito en su coñito y luego me dediqué al clítoris, ella cerraba los ojos, la película ya no importaba. Se movía en el asiento hasta que me pareció que se corría, emitiendo un gemido que hizo que me girara para ver si los vecinos se habían dado cuenta, pero si lo habían oído no le habían dado importancia porque mi vecina y su pareja estaban enfrascados en una pelea de lenguas y manos subterránea. Esa situación de ruidos y jadeos, unidos al meneo que Paulina le estaba metiendo a mi polla, hizo que yo también me corriese dejándole la mano impregnada de mi semen. Sacó la mano y con unos pañuelos que sacó del bolso se limpió, dándome uno a mí que utilicé para lo mismo. Ella se arregló la ropa y cerró las piernas, yo me acomodé igualmente los pantalones y seguí con mi brazo en sus hombros acariciándole de vez en cuando, mientras, se oían gemidos detrás y vi como mi compañera de asiento se tragaba toda la leche de su querido amigo. Nos dedicamos después a ver el final de la película, donde siempre el bueno se ...
    ... quedaba con la chica y había matado al malo (esto creo que no ha cambiado con los años). Cuando finalizó la película, fuimos a tomar algo juntos, hablamos de la Universidad, de los amigos y le acompañé a casa. Cuando llegamos a su casa, me dirigí a un lugar un poco oscuro, comencé a besarla y dirigí mi mano hacia abajo para ver si podíamos seguir lo comenzado, pero ella se resistió y me dijo que no, así que le dí un beso, le acompañe hasta la puerta y me fui a casa con la moral un poco baja y la mente caliente. El domingo no sucedió nada importante, estuve en casa, comí con mis padres y mi hermana; ésta y yo hablamos de forma normal como si no hubiese nada mas y por la tarde me dediqué a preparar los trabajos para entregarlos el lunes. El lunes, tras la clase de la tarde y de camino hacia casa, me crucé con Paulina, me sonrió con una sonrisa pícara acariciándome la mano de forma superficial , y a continuación me dijo que acababa de ver a mi hermana que se iba a casa diciéndo que había quedado conmigo para que le explicase algo de matemáticas. Yo me hice el despistado, no habíamos quedado, pero ella no tenía porque saberlo, así que me despedí de ella, quedando en que le llamaría para salir el sábado. Ella me sonrió y poniéndose roja me dijo que esperaba mi llamada. Encaminé mis pasos hacia casa, ¿qué era eso de que tenía que ayudar a Susana con las matemáticas?, no habíamos quedado en nada. Entré en casa y llamé a mi madre, no me contestó pero si salió Susana, me dijo que mamá ...
«1234...7»