1. EL ITALIANO DEL PENT HAUSE


    Fecha: 25/07/2019, Categorías: Sexo oral Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Susane, Samantha, Mariel y yo éramos vecinas y amigas desde que estábamos muy pequeñas. Nuestras edades oscilaban entre los 14 y 16. Era nuestro segundo año de preparatoria y a pesar de que ya habíamos tenido algunas experiencias sexuales, andábamos entonces con la hormona más alborotada que nunca.
    
    Teníamos la costumbre de reunirnos los fines de semana y hacer cosas en grupo o bien por separado.
    
    Cuando nos juntábamos todas la cosa se ponía peligrosa en sentido de que hacíamos mil travesuras; bebíamos alcohol, hacíamos una especie de orgias, si es que se le puede llamar así a besarnos y masturbarnos con algunos chicos de nuestra clase o vecinos del edificio. Ya en ese entonces muchas de nuestro grupo de amigas habían cruzado la línea, pero otras estábamos impacientes por saber que se sentía estar con un hombre. Era mi caso que a mi irrisoria experiencia sexual que tan solo se limitaba a un par de besos, manoseos, masturbaciones y alguna que otra mamadas mutuas. Lo último lo había hecho con mi novio actual en ese entonces, el cual se había ido a estudiar a estados unidos y yo me quedé con todas las ganas de seguir explorando. Solo pasó unas 3 veces y a decir verdad me quedé con toda la curiosidad pues lo habíamos hecho a escondidas en mi habitación bajo un sinnúmero de interrupciones mientras fingíamos que estudiábamos para un examen de matemáticas que estaba en nuestro calendario escolar.
    
    Recuerdo que me puse un vestido para más comodidad y sin nada debajo. No ...
    ... cerramos la puerta, no podíamos pues eran una de las reglas de mamá. Pero nos las arreglamos para darnos placer cuidando de que no nos viniera ni mi molestoso hermanito menor ni mi distraída (a su conveniencia) madre. Y así Juan y yo nos dimos tremendas mamadas, cubriéndonos la boca para no gritar de la excitación, probando grandes orgasmos, en tanto mi familia ni enterada.
    
    Mariel, una de mis amigas más cachondas y por consiguiente más activa sexualmente hablando, un día saliendo del colegio nos invita al grupo a comer en un restaurante que estaba situado cerca de nuestro colegio.
    
    _Oye Mariel, pero y de donde vas a pagarnos un lugar tan caro y lujoso como ese?_ le preguntó Susane algo preocupada.
    
    _Amiga, usted tranquila, que hay como pagar el doble de lo que consumamos ahí_ respondió la chica con mucha serenidad.
    
    Yo me había hecho la misma pregunta porque ninguna trabajaba y nuestros padres ni en sueños nos darían tanto dinero como el que llevaba Mariel aquel día.
    
    Y no se pero últimamente andaba estrenando ropita nueva y que se compraba todo cuanto viera en la calle y le gustara.
    
    Intuí que algo raro había, pero luego en privado le cuestionaría acerca de esto.
    
    Y cuando terminó nuestra comida más tarde, cuando llegábamos a casa la confronté al subir las escaleras.
    
    _Mariel, quieres explicarme de donde estas sacando tanto dinero?_
    
    Mi amiga sonrió con cierto aire de mujer de experiencia y me responde;
    
    _Te aseguro que disfruté mucho consiguiéndolo. Y te diré ...
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