Nuestra fantasia con Max - Relatos Eróticos

Nuestra fantasia con Max

... y vi como Max se tragaba todo ese semen y seguía lamiendo mi pancita y el falo de Juan haciéndolo brincar de emoción. "MAÑANA EXPLORAMOS MAS". Le dije Sabia que lo dejaba re caliente, pero eso me excito mas aun. Al otro dia, almorzamos y nos dispusimos a dormir la siesta. Max estaba mas cariñoso que de costumbre, juguetón y nos miraba con gran ansiedad. Ya la verga de Juan estaba bien tiesa, ansiosa, al ver mi cuerpo en esa cama, comenzo a besarme los labios, todos los cuatro, primero besos suaves luego con mayor pasión SIEMPRE QUE ME BESAS ASI ME DAN GANAS DE CHUPARTELA JUAN Y A MI ME ENCANTA AMOR, me dijo me acomodé y comence a chuparle la pija. El gemia de placer y eso me calentaba mas, haciendo que metiera cada vez más mi lengua en su sexo y su culo, placer inmenso, temblores y quejidos. También Max estaba muy excitado, con su miembro a medio salir y jadeando al lado mío, se acerco a la cama y metio su cabeza entre las piernas de Juan. AHHH ESAS DOS LENGUAAAAASS dijo Juan, y Max y yo compartimos esos sabores, su lengua áspera rozaba la pija y los huevos de Juan y llegaba hasta su ojete. Yo me mojaba cada vez mas, y Max pudo olerlo, porque de repente se dio la vuelta y metio su hocico entre mis piernas y empezo a lamerme el clitoris y la vagina y yo me deleitaba sintiendo ese "cunilingus" canino. MMMMM, ESTE PERRO CADA VEZ NOS LAME MEJOR AMOR, AHHHHH ESA LENGUA EN MI CONCHITA! Juan se acomodo nuevamente encima mio y me penetró fuertemente, más quejidos de placer, Max ...

... hizo lo suyo y comenzó a lamerle el culo, luego sus pelotas y la verga que entraba en mi vagina rozándola también. Eso fue genial, lo veo con los ojos vidriosos, abiertos, su boca seca, mis pezones parados y su cuerpo tenso, un orgasmo espectacular haciendo que me viniera completamente, danzando armónicamente con sus temblores. ¿y Max? seguía lamiendo, solo lamiendo. Quedamos quietos los dos, agotados, y sentíamos como ese mejor amigo del hombre y de la mujer nos seguía deleitando con su instinto animal pleno, sin malicia, sin egoísmos, solo instinto. Pasaron unos cuantos dias mas y cada vez era mas la calentura que teniamos y las ganas de experimentar mas cosas. Al llegar a la casa, entramos arrancándonos la ropa, locos por tener sexo del fuerte, del rico, ese sexo en el que quieres que te atraviesen de lado a lado con un pene muy duro. No llegamos a la cama, terminamos tirados en el sofá gritando y amándonos como locos. Ya no era raro que Max nos acompañara durante el acto, pero esta vez fue distinto. Él nos decía con sus ojos que quería participar, su miembro sobresalía un poco por sobre su capuchón. Juan no lo veía, pero yo comencé a acariciarlo mientras recibía una muy exquisita cogida. Observe como su pene salía como nunca lo había visto. Eso me excitaba mucho mas, Juan ya se había dado cuenta de lo que estaba sucediendo y me observaba haciéndolo. Comenzó a cogerme mas y mas duro, sabía que lo excitaba verme masturbando a Max. MI AMOR, QUE LINDO ES VERTE PAJEAR LA PIJA DE ...