1. Un suave masaje


    Fecha: 25/06/2019, Categorías: Intercambios Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... y me encontré con Mariano y José, uno de sus amigos, Mariano estaba haciendo un asado, cenamos y tomamos café, levante la mesa y un pocillo se me cayo al piso, demás esta decir que se hizo pelota, pero cuando me agache para levantarlo me agarro una puntada en la espalda y me quede dura.
    
    Ellos me llevaron hasta un sillón, Mariano me hacia unos masajes pero me hacia ver las estrellas.
    
    José, que era medico dijo que lo mejor era un baño caliente, y los masajes después, cosa que hice de inmediato.
    
    Después del baño de inmersión caliente, ya casi me caía del sueño que me dio y me acosté, Mariano delante de mí le dijo a José si no me hacia unos masajes ya que el sabia.
    
    No me gusto un carajo la idea de que otro me tenga que tocar por mas medico y amigo que fuera, pero el dolor era tal, que me la banque.
    
    José pidió crema, y se la puso en las manos y se las froto un rato para que se le calienten, cuando me puso las manos encima me puse mas tensa, que una cuerda de violín.
    
    El se dio cuenta y me dijo que me relaje, después de un rato me di cuenta de que los masajes eran maravillosos y sin ningún doble sentido, lo que me relajo mucho más.
    
    Al rato se acerco Mariano y le dijo que le enseñe, y ya eran cuatro manos tocando mi espalda, me agrado mucho y Mariano se dio cuenta, porque cuando podía me tocaba el culo, y yo con disimulo lo sacaba Yo estaba con una malla de dos piezas y Mariano me desprendió el corpiño, con tal disimulo que no lo sentí.
    
    El o no se quien, me ...
    ... comenzaron a masajear los glúteos, ya a esta altura estaba tan excitada que deje a un lado todos mis prejuicios y me dispuse a gozar, una mano me abrió suavemente las piernas, y otra entro por el costado de la malla y entro hasta lo profundo de mi vagina, que ya estaba chorreando de calentura, Mariano me agarro una mano y me la puso sobre su pija que ya estaba afuera de su pantalón y lo comencé a masturbar, mientras que el me llevaba la otra hasta la pija de José.
    
    Cuándo se la agarre no sabia si era su brazo o la verga, pense que esas cosas eran de película, me dio pánico de que me parta al medio, por eso ni lo dude y me senté arriba para controlar la situación (o fue para cogerlo cuanto antes?)
    
    La cosa es que esto duro toda la noche, cada uno se hecho cuatro y yo perdí la cuenta.
    
    Y a la mañana siguiente cuando José se fue, Mariano me abrazo muy fuerte y volvimos a hacer el amor otro vez para sellar nuestro amor.
    
    Después de esta experiencia, yo hablo de sexo con Mariano como nunca, y acordamos repetir esto cada tres meses, (cosa que cumplimos muy puntualmente).
    
    Fue así como deje de sufrir como una boluda por miss prejuicios y tabúes que no me ayudaron a nada, solo a darme cuenta que sirven para joder.
    
    También me di cuenta que estas experiencias solo las pueden hacer aquellas parejas que se aman, porque es como disfrutar de un viaje, una buena comida, una película, etc. se disfruta junto a tu ser querido.
    
    Hoy ya no soy tan prejuiciosa y vivo mejor y puedo ...