1. Familia sin tabúes (4) Raúl me deja satisfecho


    Fecha: 14/06/2019, Categorías: No Consentido Autor: ZLAZKO-KAI, Fuente: CuentoRelatos

    ... pierna la colocó encima del colchón, dejando a plena vista mi culito bien abierto, y clareándose a través del encaje de las bragas. Raúl se agachó delante de mis nalgas, y comenzó a pasarme los dedos por la raja del culo. Me la manoseaba con ardor, con entusiasmo, súper excitado, llegando incluso a pegar su nariz a mi ano, para olfatearlo detenidamente y sin prisa. Aquello me provocaba un vicio tremendo, estaba hasta mareado y la cabeza me daba vueltas, solo de pensar que ese tío buenísimo, mi delicioso cuñado estaba oliéndome el culo, y tocándomelo con sus manos.
    
    De los dedos pasó a la lengua, y de las manos a la boca. Empezó a comerme el culo por encima de las braguitas, paladeando y degustando el sabor de mi ano mezclado con el olor de su novia, que estaban impregnados en la tela. Yo estaba extasiado y alucinando, me tenía el cabrón a mil por hora, sintiendo su áspera y mojada lengua en mi ojete. Con cada lametón que me daba sentía un escalofrío, era como una descarga eléctrica que me recorría todo el cuerpo, haciendo que me retorciera de gusto y de placer. El cabrón metió los dedos por la tela del encaje y las rajó, rompiéndolas justamente por donde estaba el boquete de mi culo. Cuando mi hermana descubriera las bragas rotas, se iba a poner hecha una furia, pero me daba igual... que se joda la cabrona... Yo estaba gozando, y lo demás me daba igual.
    
    Sentí en la entrada de mi ano su glande gordo y duro, y luego un dolor completamente desgarrador cuando me la ensartó ...
    ... de un golpe. El hijo de puta me estaba desgarrándome entero por dentro, arremetía contra mi culo sin compasión ninguna, sin freno alguno, y con una crueldad desmesurada. Me hacía pensar que me tenía ganas el cabrón... pero ¿En qué grado?... ¿Ganas de follarte el culo para que disfrutemos?... o... ¿Ganas de joderte el culo, para que aprendas a no calentarme más la polla?... Parecía... no... no parecía, era una violación en toda regla, el mamonazo de Raúl me estaba violando el culo, y lo más fuerte es que a mí me gustaba, y me tenía la polla chorreando de pre-cum del gustazo.
    
    Yo jadeaba y gritaba de dolor sin parar, mientras aquél monstruoso pollón me taladraba el orificio anal. Me embestía con movimientos rápidos, y luego se paraba en seco, como si tuviera que contener el semen para que no se le escapara del gusto. Estuve un par de minutos aguantando el dolor, solo hasta que mi ano se moldeó a su grande y gordo pollón. Eran penetraciones fuertes, largas, muy duras y bestiales. De vez en cuando sacaba su polla por completo, me pasaba el capullo mojado por ojete, y luego empujaba fuerte y salvajemente hacia dentro, provocando que mi cuerpo perdiera hasta el equilibrio. Pero aun así, mi cuñado seguía bombeando y bombeando dentro de mi culo, era una bestia parda que nunca se cansaba de follar, y de darle placer a esta putilla sumisa y toda suya. La puta de mi hermana estaría satisfecha, porque el muy cabrón era el amante perfecto.
    
    - ¿A que gusta putita? -... - Te gusta que ...