1. Experiencias con mi hermana


    Fecha: 23/08/2017, Categorías: Masturbación Autor: PabloMDP, Fuente: SexoSinTabues

    ... tarde noche, y ella iba a la escuela en el turno de la mañana, por lo que estaban medio complicados para estar juntos. Así que él, acostumbraba a venir a casa después del trabajo, a eso de las 7 o 8 pm. Se quedaba a comer, y después de un rato mis papas se iban a dormir a eso de las 22 o 23 pm. Por suerte del otro lado, de una de las paredes del comedor, daba a la pieza de mi hermana. Una o dos horas, después que mis papas se iba a dormir, me acercaba muy sigilosamente a la puerta de la habitación de mi hermana, y podía escuchar, unos gemidos con vos tímida, “ahhh ahhh ahhh, mas despacito, ahhh ahhh ahhh”, cuando escuche eso, mi pene se puso como una roca, casi instantáneamente, seguí escuchando sus gemidos, coordinados con el ruido que salía de los resortes del colchón, de su novio solo se escuchaba, una especie de respiración fuerte. Este empezó a ser mi nuevo pasatiempo, esperaba que mis papas se durmieran, y cuando llegaba la hora, me acercaba a la puerta, me bajaba los pantalones, sacaba mi pene que estaba como una roca, y empezaba a masturbarme, cerraba los ojos, y la escuchaba a ella gemir, imaginando que era yo el que la estaba penetrando. Los gemidos iban cambiando, al principio decía ahhhh ahhhh mas despacito, pero después empecé a escuchar, q decía ahhhh si métela más profunda ahhh siii ...
    ... ahhh siii, en esos momentos mi cuerpo reaccionaba solo, y empezaba a mover la cadera de adelante para atrás, mientras me masturbaba con una mano, y la otra la apoyaba en la pared como sostén. En mi cabeza, mientras la escuchaba gemir, me repetía a mí mismo, si toma putita, acá tenes la pija de tu hermano, te gusta?, y escucha sus gemidos ahhhh siii siii métemela, a cada rato sentía como acababa, y me fluía el semen de la punta del pene, hacia piso. A veces para sentirme más excitado, buscaba alguna tanguita de ella en el baño, y mientras la escuchaba gemir, la lamia una y otra vez, otras veces simplemente me la ponía, mientras me masturbaba al compás de sus gemidos. Después de un tiempo ella termino con su novio, y mi nuevo pasatiempo se fue al tacho. Cuando cumplió 19, consiguió un muy buen trabajo, con un sueldo bastante alto, y al poquito tiempo se fue a vivir sola. De ahí en más, ya no tuve oportunidades, para espiarla, ni intentar tocarla ni nada. Hoy en día yo tengo 25 años, y ella 27, y todavía me sigue excitando, de la misma forma que cuando éramos adolescentes. Les agradezco a los que lo leyeron, y les aseguro que el relato es 100% real. Sé que en comparación a otros relatos que hay en la página, este es bastante simplón, pero no quería mentir ni exagerar, escribiendo cosas que no pasaron. 
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