1. Mi esposa vuelve a las andadas


    Fecha: 02/05/2019, Categorías: Anal Sexo con Maduras Tabú Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    Después del primer encuentro entre mi delicada mujercita y su anterior jefe; la relación continuó por un buen tiempo.Ellos siguieron hablando por teléfono; incluso a veces en mi presencia.Podía notar la turbación que eso le provocaba a Anita.Arturo le decía que ella estaba muy cogible y siempre quería encontrarla otra vez en una cama; pero mi esposa me juraba que ella no estaba muy convencida de continuar la relación. Yo no estaba tan seguro…Yo disfrutaba viéndola tan entusiasmada y caliente cada vez que hablaban por teléfono. El hombre era casado y por ello no tenía muchas posibilidades de escaparse con Ana.Cada vez que cogíamos, cuando ella llegaba al borde de su primer orgasmo, se acordaba de la tremenda cogida que le había dado su antiguo jefe y eso la ponía mucho más caliente. Al acabar me miraba a los ojos, suplicando que la dejara ir a coger otra vez con ese tipo. Me decía que necesitaba esa tremenda verga dura dentro de ella…Sus súplicas me ponían frenético y entonces comenzaba a bombearla con toda mi bronca de saber que prefería otra verga a la mía. Pero Ana lloriqueaba diciendo que su ex jefe la había enviciado con el tamaño de su pija y la tremenda manera en que la había dominado esa tarde…Me dijo que la ponía en cuatro y le metía unas tremendas estocadas violentas, que la hacían aullar como una perra en celo; pero ella en vez de sufrir o demostrar dolor, gritaba y suplicaba todavía por más y más…A mí me excitaba sobremanera, porque esa era la idea: que Anita ...
    ... disfrutara su sexualidad al máximo.Un día Ana me pidió que la acompañara a encontrarse con ese hombre y, de paso, podría conocerlo. Ella me aseguró que él no sabía nada sobre nuestro acuerdo; donde yo le daba vía libre para coger con otro hombre.Fuimos hasta la oficina de su antiguo trabajo. Arturo nos recibió amablemente; aunque su cara no podía disimular una expresión de sorpresa al verme allí, acompañando a mi sensual esposa, como si yo no supiera nada de sus avances sobre ella, ni tampoco nada sobre la tremenda cogida que le había dado…Mientras charlábamos animadamente, Ana pareció arrepentirse y dijo que debíamos retirarnos. Pero Arturo la convenció de quedarse un rato más. Le dijo que tenía algo para mostrarle a mi esposa y me pidió que esperara en su oficina, mientras él llevaba a Ana un par de pisos más abajo…a la sección administrativa, me aclaró.Esperé por un largo rato y finalmente reaparecieron ambos.El tal Arturo venía con cara de satisfacción y estaba muy relajado.Mi esposa parecía estar algo turbada y hasta casi enfadada. Su cara estaba colorada y unas leves gotas de sudor perlaban su frente. Me pareció ver que caminaba con cierta dificultad. Me miró con una expresión de culpa y entonces supe que ese tipo se la había cogido otra vez, en algún baño, otra oficina vacía o en cualquier otro lugar de ese edificio.Nos despedimos y, al llegar a nuestro auto, Anita me describió que su jefe la había llevado otra oficina cercana, que estaba desierta. La empujó contra un ...
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