1. DOMINADO


    Fecha: 14/04/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: dulces.placeres, Fuente: SexoSinTabues

    ... evidentemente le dieron ideas y me pidió experimentar conmigo, quiso que fuera su ‘conejillo de indias’. Ya en la cama, ambos completamente desnudos, paso unas correas por mis muñecas y me sujetó fuertemente al espaldar de la cama y luego mis tobillos al otro extremo, a media luz trajo una vela enorme encendida, yo la miraba resignado, atado, inmóvil, esperando su jugada, ella entonces probó dejarme caer unas gotas de cera caliente y al sentir ese hermoso ardor en mi piel supe que ya no tendría retorno… Bruna jugó todo lo que quiso, dejando rastros de cera en mi piel, mi verga estaba dura como nunca y estallé en un terrible orgasmo, producto del placer de la excitación, ella se masturbó a mi lado y terminamos cogiendo como locos… Ese fue el principio, y si bien eran situaciones especiales, porque habitualmente teníamos un sexo más tradicional, en verdad ambos esperábamos y necesitábamos estos juegos, cuando ella me ataba y quedaba a su merced me podía embravecido, como un toro enjaulado y los juegos poco a poco fueron cambiando, probando nuevas cosas, Bruna se encargaba de todo, para mí todo eran sorpresas y me gustaba que me sorprendiera, un día fueron esposas, otra vez un pequeño látigo con el que me castigaba, y hasta compró un traje de cuero con el que cumplía su rol dominante. Tomó la maldita costumbre de torturar mi pija, teniéndola tiesa, apretada entre sus dedos, acariciando apenas mi glande, podía estar siglos haciéndolo sin inmutarse, me dejaba acabar cuando solo ...
    ... llegaba al límite de mis posibilidades, ella miraba y se reía, con sus ojos fijos en mi glande, escupiendo litros y litros de leche, la tortura era eterna y el placer de acabar infinito… Y Bruna no decía, Bruna hacía, Bruna no consultaba, Bruna decidía, ella se sentía muy cómoda en ese rol de hacer todo a su manera, sus decisiones en la vida diaria se prolongaban a la cama, donde era ama y señora y yo hacía lo que quisiera que haga… Tiempo después mi cuerpo evidenciaba los castigos, latigazos, ataduras, mis pezones vivían adoloridos por tantos pellizcos, ella me exigía que me depilara por completo, en especial mi intimidad, y era todo como una maldita droga, más teníamos más queríamos… Y llegó el día del juguete, Bruna me ató a la cama como solía hacerlo, disfrutó golpearme, mi verga dura era evidencia de mi placer, tenía unos altos tacos, empezó a pisarme, literalmente, la suela fría aplastaba mi pija y mis bolas contra mi cuerpo, cerraba los puños en infinito placer. En un momento me dejó solo retirándose de la habitación, cuando volvió, para mi sorpresa tenía una enorme verga de juguete entre sus piernas, se acercó a mi lado mientras untaba el juguete con lubricante, levantó mis piernas con el sadismo pintado en su rostro, empezó a empujar en mi esfínter, empezó a doler, y con el dolor el placer, maldita… Minutos más tarde Bruna me sodomizaba, esa larga y ancha verga entrando y saliendo de mi culo, me hacía gritar, mi pija permanecía rígida y sentía un raro placer, me sentía ...
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