Patas arriba (IX) - Relatos Eróticos

Patas arriba (IX)

Llega un punto de la historia donde decidí unir este relato con uno que me pidieron y crear una sola historia para no hacer esperar a mi gatito hasta terminar esta, así que lo más difícil es ponerme de acuerdo conmigo mismo y no contradecirme, en fin, aquí está el capítulo que nos interesa:

**********

Patas arriba IX

Iván

Cuando regreso a casa del insti siempre miro el buzón para recoger las cartas, como vuelvo a la hora de comer, casi siempre han llegado ya todas las cartas y si papá y mamochka logran comer en casa, pues ya tienen sus correspondientes listas en los correspondientes montones, sino, las dejo allí y que las vean en la cena, junto con las que recoge papá cuando regresa a casa en la tarde. Como es normal para un chaval, salvo las cartas que me envían del insti y que yo ya conozco su contenido antes de que lleguen, nunca me envían nada, por lo que me sorprendí ese día al ver que había una carta para mí, también me sorprendió que el sello pusiera Finisterre, pero cuando la volví para mirar el remite mi corazón dio un vuelco: ¡era Ricardo!

Vivimos en el piso 9 y el trayecto en ascensor se me hizo eterno, clasifiqué las cartas de la familia a toda prisa y sin preocuparme mucho por la comida me fui directamente a mi habitación, me moría por leer lo que Ricardo tuviera por decirme, tal vez Ylian, Dani y Javi tuvieran razón, en el curso de estas dos semanas hablé con los tres varias veces y los tres dicen que esa actitud no es propia de Ricardo, ellos ...

... dicen lo que yo ya sé: que es decidido, tenaz y noble, incapaz de hacer algo como lo que insinuaba ese mensaje por sí mismo. Precisamente por eso me esperaba una cosa como esta carta, pero igual me sorprendió verla. La leí unas tres o cuatro veces sólo para asegurarme que la entendía bien, mi Ricardo actuó coaccionado, no quiso hacer eso, bien sé yo que mi chico no es un cobarde. En una nota adjunta me decía que, aunque normalmente no preguntan por las cartas que recibe o deja de recibir, suponía que vigilarían bien que no tuviera ningún contacto conmigo, así que me pidió poner como remite a Dani o simplemente no poner ninguno, para así evitarnos cualquier problema que pudiera surgir.

De inmediato avisé a Dani y a Ylian de su carta y los dos me contestaron algo así como “te lo dije”, pero bueno, yo estaba contento con la carta y poco me importó su respuesta, eso sí, le escribiré una respuesta a Ricardo y será pronto.

Ylian

Vaya, dos semanas, supongo que Ricardo no pudo hacerlo antes... pero bueno, al menos todo mejora para mi primo Vanya, ojalá que se reencuentren pronto, nada me alegraría más, pero claro, él no es mi única fuente de noticias de Madrid, Cami está mal, el pobre no es que no supere lo de Ester, eso está cerrado, incluso Aurora es una buena amiga suya, lo que no supera es el miedo a estar solo, el miedo a no saber si vendría alguien más a su vida, al menos no se siente usado, no siente que jugaron con él, no siente que todos lo ven como un culo bonito que ...