1. Cubriendo bien a mi madre


    Fecha: 26/01/2019, Categorías: Incesto Autor: delnorte1, Fuente: RelatosEróticos

    Hay una película de Schwarzenegger, puede que sea Comando, o algo así, no recuerdo bien, en que el protagonista llega del bosque motosierra en mano y cargando un tronco grande al otro hombro. Luego, con un hacha abre unos tocones de madera al medio como si fueran de mantequilla; da la sensación de que cualquiera que vea eso sienta complejo de inferioridad, pero eso es una fantasmada, os lo digo yo…
    
    Porque las películas son películas, pero yo soy real. Soy trabajador forestal hace años y me gano la vida en los bosques y en los montes, cortando madera. Un mileurista, como cualquier otro, todo el día agarrado a la motosierra, tirando pinos, robles, cualquier tipo de árboles, sobre todo muchos eucaliptos. Un hombre de batalla, con pocos estudios, de clase baja. Un ejemplo de la realidad de la España húmeda, la del Norte, de la dureza de la vida en los municipios rurales, donde quien no es duro o no sobrevives o la vida te hace duro a hostias.
    
    Inviernos muy fríos y mojados. Veranos bochornosos de sol de nube y calor húmedo. Grandes árboles cayendo a mi paso. Olor a gasolina, motor y resina. Ruido ensordecedor. Peligro, riesgo, miedo. Días que se hacen eternos, maldita sea mi suerte. Acojone con los tendidos eléctricos. Pendientes en que cuesta tenerse en pie. Maleza. Cansancio. Latas de callos y de sardinas, bocadillos. Insectos. Sólo en el monte muchos días, otros con más gente. Dos o tres cervezas bien frías al final del día, o un cubata, en alguna taberna. Necesito ...
    ... anestesiarme un poco para no pensar demasiado, para no irritarme. Soy un Rambo en una jungla, pero sin glamour, estrenos taquilleros ni nominaciones a premios de cine. Un Rambo en una jungla sin guerrillas ni vietcongs, de acuerdo, pero también sin ositos ni Bambis.
    
    El fin de semana cuando no trabajo, salgo a dar una vuelta por ahí, cenarme un chuletón de vez en cuando, calzarme unas birras o copas de cualquier matarratas, con colegas muy parecidos a mí, de batalla, echarnos unas risas, ponernos como cubas… Antes fumaba, ahora ya no fumo, tuve que dejarlo, me ahogaba mucho en el trabajo.
    
    Y aunque hubieras nacido inteligente, las formas de vida, el ambiente que te rodea, tu familia y tu condición social y demás te acaban volviendo un perfecto imbécil.
    
    Cuando vamos a dar una vuelta, hagamos los planes que hagamos, siempre acabamos en un puticlub. Muchas veces, yo solo, me escaqueo disimuladamente de los colegas, y me piro a un local de luz roja, y me veo de madrugada en alguna habitación, cubriendo alguna hembra, también escapada de alguna jungla de cualquier rincón del planeta, y procuro hacerlo lo mejor que puedo, o lo mejor que sé. Al menos, alguna gracia tenía que tener mi trabajo, solárium no me hace falta, de brazos y de músculos ando bien arreglado, también soy alto y medianamente guapo.
    
    No es que me guste mucho gastarme pasta en los puticlubs, pero dado mi status, para buscar hembra, yo a una magistrada, ni a una médica, ni a una profesora, ni a una escritora, no ...
«1234...»