Mi cuñada Andreina (La achechina) - Relatos Eróticos

Mi cuñada Andreina (La achechina)

Mi cuñada Andreina (La achechina)

Esta es una historia que jamás contaría a nadie.

Pero no me he podido resistir a contarla y que sepan lo que me ha pasado.

Es una historia real y verídica.

Andreina es una mujer morena clara de 1.59 de estatura, con 29 años actualmente, un cuerpo envidiable, unas tetas deliciosas y una cola sabrosísima, con un hijo mi sobrino, ella es la Mujer de mi Hermano, mi esposa y yo tenemos casi 10 años de casados.

Pero yo con 40 años para ese entonces, estaba enamorado de mi cuñadita casi desde que la conocí.

Andreina siempre ha trabajado, aquí y allá, además de ser una excelente estudiante, de la UCLA.

Yo con mi carácter fuerte y chichara chero, creo haber llamado su atención, que es muy contrario al de mi hermano.

Comencé a notar desde hace unos años la atención que ella me dedicaba, era una atención muy especial, al cual yo correspondía sin propasarme aun sintiendo las ganas de poseerla o hacerla mía de estar seguro de ser correspondidos mis deseos(de verdad me atraía su hermosa juventud, 24 años para esa fecha).

¡Bueno eso solo pasaba por mi mente… mas no lo expresaba!

Un buen día Andreina, nota que yo la observaba mucho y me hizo un menear de cadera muy sexual, a la vez que me sonreía. Yo obviamente me sonreí sin darle importancia o cerebro a la acción de mi cuñadita.

En días posteriores ella me envía varios mensajes, muy insinuantes pero solo uno le respondí con toda sinceridad (Usted es la cuñada mas bella que ...

... tengo), al cual ella me contesto, así;

¿Cuñado bello, yo le gusto a usted…?

Y yo me quede en una pieza, al cual ella me repitió el mensaje agregándole una disculpa;

Eso me obligo a responderle con mas sinceridad que la respuesta anteriormente dada, y

-. Le dije no te disculpe amor, porque tu siempre me haz gustado y eres objeto de mis deseos ocultos, pero siempre pienso que eres la mujer de mi hermano. Y por eso trato de estar lejos de ti, a pesar que siempre coincidimos en todas partes.

Ella, me escribe… quiero que hablemos un rato en mi casa.

Como viven cerca, -. Le indico voy para allá.

Al llegar, me hizo pasar y me dio un beso tan apasionado, y duradero que casi, le hago el amor ahí mismo. Hablamos rápido, pero de todo y concertamos vernos en un hotel, para supuestamente conversar mas de lo recién descubierto por los dos.

Bueno el día de la cita, ella me envió un mensaje al celular indicándome que en donde nos veríamos, y le indique el nombre de un restaurant bastante cerca de su trabajo.

-Ella, me responde, que no fuera tan visible a todo el mundo, ese lugar.

-Yo respondí, tranquila amor debemos ser muy cauteloso para vernos, y ya el hotel esta reservado, bastante cerca de donde estoy esperándote.

-Ella-. Gracias amor, ya voy llegando a ese sitio.

-Al llegar y vernos de lejos, me acerque y la salude como siempre,(un besito en la mejilla) y le dije caminemos, por aquí hasta el hotel.

Al llegar al hotel y retirar la llave de la pieza, ...