1. La iniciación


    Fecha: 21/12/2018, Categorías: Intercambios Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    La historia que les voy a contar, ocurrió en el año 2000. Somos afortunados en que tanto a mí como a mi mujer, nos atraen los mismos deseos. A pesar que nunca lo habíamos hecho, fue como si lo hubiésemos hecho toda la vida; puesto que cuando hacemos el amor, muchas veces, incorporamos estas fantasías a nuestra rutina.
    
    Yo tengo 44 años y soy piloto de una línea aérea. Vanessa, es mi mujer, tiene 33 años y es auxiliar de a bordo de la misma empresa. Estamos muy bien casados desde hace tres años, todavía sin hijos. Desde que empecé a salir con Vane, no se si por celos o que, le fui insinuando que fulano la miraba con ganas o que mengano preguntaba mucho por ella o que sutano Etc, Etc. Esto le excitaba mucho e indudablemente a mi también. Así que cada vez que hacíamos el amor, le decía al oído, que hoy había venido un invitado y que le hacia esto de acá, mas esto de allá y la perra gritaba de placer. Cada día que pasaba, las historias eran más excitantes y moríamos de placer. Así que lo convertimos en un hábito en nuestras diarias relaciones sexuales, que mejoraron día a día.
    
    Esta historia, comienza un día en que yo tenía que hacer un vuelo corto a Mar del Plata en un horario relativamente temprano. Mientras me estaba bañando y afeitando para ir al aeropuerto, me acordé que esa tarde iba a volar con Alejandro, un copiloto joven y muy apuesto, con quien mi mujer se babea mal. Eso me produjo tal mezcla de bronca, celos y excitación que terminé masturbándome en la ducha ...
    ... como un perro, pensando en Vanessa.
    
    Insatisfecho y sediento de placer, me motivé a idear este malvado plan que enseguida puse en marcha.
    
    Antes que me pasara a buscar el remise, llamé por teléfono a Vane al celular y le pedí que me viniera a buscar al Aeroparque con su auto a las 18 Hrs. Ella concordó y me preguntó que íbamos a hacer. Solo le contesté que se viniera súper empilchada porque iba a ser una sorpresa. Durante todo el trayecto, fui pensando como armar la historia para que no fallara y pasara lo mas natural posible.
    
    Al llegar a Aeroparque y me encontré con Alejandro. Hicimos todas nuestras tareas para el vuelo y cuando nos íbamos para el avión le pregunté si todavía estaba interesado en canjear su departamento por nuestra casa. El se acordó y me contestó que sí.
    
    Paso a explicar, Alejandro vive en un departamento muy bonito en Belgrano y nosotros vivimos en una casa en un country. Da la casualidad, que semanas atrás me encontré con él en nuestro country y cuando le pregunté que estaba haciendo, me contestó que estaba buscando alguna casa para comprar, porque le había encantado el barrio. En ese momento, yo le respondí, que nosotros estábamos por vender nuestra casa porque teníamos intención de mudarnos a algún departamento grande en la zona de Belgrano. El me contó que tenía el departamento ideal para nosotros. Como yo me tenía que ir, la charla quedó trunca allí. Quedamos que en otro momento íbamos a seguir hablando, porque ambos estamos interesados en la ...
«1234...8»