1. Entregando a Lorena 1


    Fecha: 04/12/2018, Categorías: Anal Voyerismo Autor: aristurman, Fuente: xHamster

    ... culo tiene tu mujer, y me parece que tiene ganas que alguien se lo rompa… Sacate toda la ropita y mostrame bien ese orto, nena, le ordenó Carlos.Note que Lorena parecía asustada por la forma agresiva en que él se lo ordenaba. Me miró como buscando ayuda. Pensé en parar todo pero el cuerpo me pedía más, así que le hice un gesto para que continuara.Entonces ella se quitó las zapatillas y siempre de espaldas a nosotros se sacó las calzas, dejando ver una diminuta tanga blanca metida en la raja de su cola.En un segundo Carlos estaba detrás de ella, con su enorme y dura verga en la mano. Yo me puse de frente para no perderme nada, mientras me masturbaba a un ritmo frenético.- Nena, mira cómo se hace la paja tu marido, se ve que le gusta que seas una putita y que te dejes romper el culo por otro hombre, un hombre verdadero.Lorena dio vuelta la cara para mirarnos y se mordió el labio inferior. Carlos empezó a manosearle el culo. Yo trataba de aguantar a no acabar.- Que culo duro nena, decime la verdad, de veras está virgen? Le preguntó mientras le metía un dedo en el hoyito.Lorena dejó escapar un grito de sorpresa.- A tu marido le podrás mentir pero a mi no, este culito ya está muy abierto para ser virgen, mientras le insertaba un segundo dedo.Lorena me buscó con la mirada y dijo lo que nunca imaginaría.- Perdoname.- Ah, pero que puta resultaste, así que no le entregabas el culito a tu marido pero ya te lo rompieron otros por ahí. Le dijo Carlos, mientras seguía metiendo y sacando ...
    ... los dedos a un ritmo infernal.Yo estaba sorprendido de no estar enojado. Al contrario, me excitaba la idea de saber que era un cornudo y que el culo de Lorena no era virgen.- Vamos al dormitorio nena, quiero romperte ese culo ya mismo, dijo Carlos.Cuando llegamos arriba le ordenó a Lorena que se pusiera en cuatro patas sobre la cama.Lorena se acostó boca abajo, escondiendo la cara en la almohada. Carlos se arrodilló detrás de ella y me pidió algo para lubricarle el ano.Del baño traje un pote gel lubricante y Carlos se dedicó a untarle el estrecho hoyito de mi esposa y la gruesa cabeza de su verga.- Pedime por favor que le parta el culito a tu mujer, me dijo socarronamente mientras le golpeaba las nalgas con esa enorme verga.Yo no decía nada.- Nena, hasta que tu marido no me lo pida no te la meto, continuó.Lorena me miró suplicante y dijo, por favor, pedile.- Dale Carlos, hacele la cola a mi mujer por favor.Entonces vi como le metía esa gigantesca pija en el culo de mi esposa hasta casi la mitad. Ella pegó un grito agudo y trató de escaparse hacia adelante, pero Carlos la sostuvo por los hombros y la dejó inmóvil, mientras empujaba contra las caderas de Lorena y le metía totalmente su dura verga hasta el fondo. Ella entonces dio otro fuerte alarido de dolor, pero luego comenzó a hamacarse, mientras parecía gozar de la brutal penetración. Carlos le entraba con todo, sin demostrar piedad. Rebotaba en la redonda cola de ella. La tomó por las tetas, mientras la atraía hacia él. Era ...