1. El hombre oscuro


    Fecha: 16/04/2024, Categorías: Fantasías Eróticas Tus Relatos Autor: egudo95@yahoo.com, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Yo -lo admito- siempre quise tener una aventura, era para mí una fantasía conocer a una persona y que suceda lo que tenga que suceder. Pero eso no significa que deje de querer a la persona que está a mi lado y al círculo que me rodea. De hecho gracias a ese círculo y a la persona que me sorprendió casi hasta la locura, pude volver a los míos y a vivir una vida normal. No importa mi nombre, voy a poner que soy Lorena y que la persona involucrada es Felipe.
    Felipe es para mí un hombre oscuro ( no hablo de un hombre de color) si bien es bastante morocho , no me refiero al color de piel, sino a lo parco, misterioso, callado, de pocas palabras y ausente. El jamás me invadió en mi privacidad y en mi familia. Jamás se aprovecho y se puso en una situación dominante, el solo preguntaba en algún texto o lo ponía con palabras , pero debo admitir que era implacable. Cada ocurrencia era como que me tocaba hasta lo más íntimo de mis fibras del placer, como si conociera todo lo que yo había -de alguna forma- fantaseando o deseado. aún así, lo más increíble era su discreción, el hombre no prendía una vela si sabía que lo iba a delatar en medio de la noche y eso lo hacía al menos implacable, casi invisible. y cuando se tuvo que dar a conocer , lo hizo y así como apareció , también desapareció.
    Caminaba junto a mi marido por el centro del pueblo , era un día apacible de verano, todo el mundo vacacionaba y el pueblo estaba sumamente tranquilo. Decidimos ir  a tomar un café, eran las 19 hs. Al ...
    ... llegar a un clásico bar de la ciudad , nos sentamos en el interior junto a la ventana; En otra mesa, había un grupo de muchachos jóvenes , no digo chicos, pero si claramente menores que mi esposo y yo. y se divertían tomando algunos cafés, otra cerveza y otras distintas bebidas. 
    Mi cabeza siempre estuvo llena de fantasías ,  pero nunca las pude ordenar , por qué no todas apuntaban a lo mismo y siempre tuve pereza de sentarme a revisar mis locuras. 
    En ese momento , este grupo de personas se disponía a pagar y a retirarse de local, cosa que hicieron, mi marido se levantó para ir al baño en el momento que estos se iban -reconozco que hay mucha casualidad en esto- uno de ellos paso , me miró sería y profundamente y me dejó un papel en la.mesa, no sin antes de irse guiñarme un ojo. Admito que quedé sorprendida y nerviosa, tomé el papel con la nota en mis manos y mire a mi alrededor a ver si estaba siendo observada. -por suerte no- así que lo metí en mi cartera ; Mi marido retornó del baño, combersamos unas pavadas más pagamos y nos fuimos. 
    Ya me había olvidado de lo ocurrido en aquel café, hasta que 3 días después veo al mismo muchacho caminando por la calle. Inmediatamente después de terminar mi jornada de trabajo volví a mi casa casi con desesperación de que la nota continuara en mi cartera donde yo la había dejado. Para mí tranquilidad  ahí estaba , en un pequeño bolsillo interno. Encerrada en el baño, tome la nota y me dispuse a leer una frase que me dió vida. " SOS muy ...
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