1. la escort y yo


    Fecha: 13/03/2024, Categorías: Erotismo y Amor Tus Relatos Autor: topo76, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    soy pedro me dicen el indio por mi aspecto de piel morena y pelo largo con cola de caballo aparte mido 1.85 por lo que doy ese aspecto.. trabajaba en la construcción hasta que conocí a esmeralda como se hacia llamar en las apps de las damas de compañía ósea putas finas a domicilio. le hacíamos una remodelación a su casa cuando gracias a mi aspecto rudo y malo ella me ofreció un trabajo de chofer para trasladarla con clientes que al verme en el carro no se quisieran pasar de listos. a mi se me hiso bien porque era menos friega para ganarme  mi sueldo solo eran unas horas en la tarde o noche y no todos los días.  en unos meses nos hicimos buenos amigos. esmeralda era alguien  con excelentes cirugías plásticas parece conejita de esa revista para caballeros y tiene buenos clientes de dinero y poder en el gobierno o industriales que me daban muy buenas propinas. en una ocasión la constataron unos juniors  mal educados, drogados y malas intenciones querían a fuerzas  una grandbang que esmeralda no hacia ese servicio le recomendó a una colega de ella pero los niños ricos a fuerzas querían a mi jefa les cumpliera su fantasía. las situación se puso tensa tuve que intervenir fingí ser un ex convicto que no le interesara regresar al penal ...
    ... y actuación dio resultado y rescate a esmeralda de aquella situación.. esa noche me invito unos tragos en su casa para olvidar el mal rato. fue cuando ella se abrió y me platico su historia el porque se dedicaba a eso. poco a poco el respeto de empleado- jefa se fue diluyendo ella necesitaba un hombre que la protegiera y yo con buen culito para coger. ya cuando menos pensé la tenia en mis brazos le agarre sus nalgas y chupaba esos ricos implantes de senos que tiene. mientras hablaba sucio decía
    papito cógeme, préñame  quiero tu leche dentro de mi. soy putita me gusta la verga.  Eso me hiso a mi entrar en modo de semental salvaje le rompí se vestido le daba sus nalgadas. me acuerdo que la cargue desnudos y así me la cogí ella estaba en estasis total. me mordido el cuello como si fuera vampira me cacheteaba pidiéndome que le diera duro que le destrozara su culo. ese gran movimiento de caderas al follar que tiene ese mismo que hace que sus clientes repitan a mi me volvió loco. luego lluvia dorada en mi cara mientras me decía que yo era de su propiedad. fue como nuestro rito de unión me tome cada gota de lo que salía de esa vagina tan deseada y usada. desde ahí  es mi mujer la dejo trabajar pues le gusta ganar dinero y comer vergas 
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