La mujer de mi primo - Relatos Eróticos

La mujer de mi primo

Hola! mi nombre es lo de menos, quiero contar lo que pasó hace unos años con la esposa de mi primo.
En ese tiempo ella era una mujer de 25 años con senos grandes, cintura pequeña y unas nalgas que vuelven loco a cualquiera y yo contaba con 15 años aún, por cuestiones necesarias ella acudía a la casa de mi madre a lavar ropa, lo cual ocurria una o dos veces por semana, mi madre trabajaba durante el día por lo cual casi no se permanencia, en una de tantas ocasiones que ella llego a realizar sus actividades como de costumbre se dirigió a mi y me preguntó si podía ocupar el baño por lo cual sin malos pensamientos le dije que si, el baño de la casa daba directo a mi habitación, yo dejé la puerta abierta ya que siempre era costumbre dejarla así, ella al salir del baño me llama y yo enseguida llegó preguntando ¡Que pasa!? Al llegar veo que está toda empapada ya que se rompió la llave del lava manos e hizo que se mojara toda, yo le traigo una toalla enseguida pero noto que no traía brasier ya que se le marcaban los pezones y de igual manera se le notaba que traía una tanga ya que se cargaba unos leggins, yo me metí de vuelta a mi habitación ha realizarme una paja ya que no podía sacarme esa imagen de la mente, así pasaron los días y a la siguiente vez que volvió le empecé a sacar plática de como iba su vida de matrimonio con mi primo a lo que después de tanto platicar entro en confianza y me contó que no le hacía falta nada y que el era muy detallista pero que no todo era miel sobre ...

... hojuelas y que lo malo era sobre su intimidad ya que no tenían mucha acción como cuando eran novios, yo le dije que era normal que eso pasara en los matrimonios y que casi siempre la chispa se perdía, pero le dije que tenía la curiosidad de saber que hacia para poder aguantar el no tener sexo a lo que ella me dijo que esa era una pregunta muy directa pero pues que en realidad habia comprado unos juguetes para quitarse las ganas pero que no era lo mismo, le hice la pregunta que si no había pensado en darse placer con alguien más a lo que me dijo que era imposible porque no salía casi de su casa y que tiene el temor de intentarlo y perder su matrimonio, sin más le dije que si me dejaba yo podría complacerla y que nadie se enteraría, ella solo se rió y me dijo que era un niño que eso jamás pasaría, yo sin más le enseñe mi vrg la cual de tanta plática ya tenía dura, a lo que se sorprendió de ver qué me media más o menos en ese tiempo unos 17cm, ella se puso sería y no quizo seguir hablando conmigo, yo con miedo me fuí ya que pensé que le diría a mi mamá, así pasaron los días hasta que un día menos pensando ella me presta de nuevo el baño y le digo que si, pero como de costumbre deje la pueda abierta y en unos minutos la veo entrar a la habitación sin ropa, mostrándome unos de los mejores pechos que he visto en mi vida, grandes con unos pezones y aureolas rosaditas que me volvían loco, su vagina depiladita, unos labios vaginales rosaditos y un tremendo culo a lo cual ella me dijo ...