1. Una Gatita en celo


    Fecha: 17/11/2018, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Hace dos años acabe la secundaria, allí tuve una novia llamada Karla, es una chica blanca, de cabello liso de color castaño claro, ojos verdes y un cuerpazo. Cuando nos hicimos novios ambos teníamos 15 años y estábamos en el 3 año. Al principio me costó un poco conquistarla ya que en primer lugar siempre ha tenido muchos pretendientes y en ese tiempo digamos q yo no era la gran cosa y ella pues siempre ha tenido el defecto de nunca cortarles las alas a sus conquistadores a tiempo, sin embargo ella me gustaba demasiado, me volvía loco y no hacía más que pensar en ella y cada día se ponía mas y mas hermosa. A Karla le gustan mucho los gatos, de hecho le encantan que le digan “gatita”, y ella misma se autonombra así. Ella es una chica sensible, tierna y le gusta el romance, pero también es muy coqueta, cariñosa y apasionada y un tanto bipolar.
    
    Desde que nos hicimos novios nuestra relación siempre fue excelente, nos creíamos la pareja perfecta aun cuando yo tenía que lidiar con el equipo de pretendientes que continuamente la asediaban. Me encantaba estar con ella y ella conmigo, sin embargo algo faltaba en esta relación y es que ella me pidió que siempre la respetara, en pocas palabras “nada de sexo”. Al principio no me pareció de mucha importancia, ya q estaba de acuerdo en no hacer nada que ella no quisiera, y pensaba que una relación no era solo sexo.
    
    Sin embargo con el tiempo tanto ella como yo nos fuimos dando cuenta de que no iba a ser tan fácil abstener nuestros ...
    ... impulsos. Cada vez que nos besábamos sobre todo en privado, muchas veces perdíamos el control y comenzamos a besarnos con tal intensidad que nuestras manos poco se controlaban de tocar “lo que no debíamos”. Muchas veces yo terminaba con una excitación que tenía que llegar a mi casa a desahogar toda aquella calentura, y personalmente supongo que ella debió hacer lo mismo. Poco a poco nos íbamos haciendo más vulnerables y nuestra fuerza de voluntad comenzaba a escasearse.
    
    Un día en una fiesta me convenció de bailar reggaetón, la verdad aunque a ella si a mí no me gusta esa música pero no me iba a quedar sentado toda la noche porque no dejan otra música, así que fui con ella hasta la pista de baile. Recuerdo que la canción que bailamos fue muy intensa, hablaba de “pegarse a la pared”, “tocarse por todos lados”, “azotarte”, “hacerte mía” (como casi todas las canciones de este tipo) en fin nada recomendable para alguien que está en abstinencia sexual, mucho menos cuando lo bailas con la persona que más te gusta. Finalmente después de un rato ya ambos estábamos excitados, recuerdo que ella rodeaba mi cuello con sus brazos, cerraba los ojos y me besabas mientras yo apretaba su cintura contra mi cuerpo, acariciaba su espalda por debajo de la blusa y besaba su boca, sus mejillas su cuello. AL final tuvimos que separarnos y dejar de bailar porque sino acabaríamos haciendo lo que decía la canción y mucho mas, ahí delante de todo el mundo. Y así se fueron dando muchas situaciones hasta ...
«123»