Intercambio no planeado para celebrar - Relatos Eróticos

Intercambio no planeado para celebrar

... se sentó al lado de mi esposo y también reía.
En ese momento me dí cuenta de que ya estábamos algo pasados de copas porque me ví platicando con el amigo de mi hermana en la cocina muy risueños.
La sonrisa se me borró al ver a mi esposo hablando al oído de mi hermana y ella riendo y se retorcía diciendo que sentía cosquillas.
En ese momento lo llame a la cocina y Jacobo se fue con mi hermana a decirle que ya era tarde.
Le reclamé a Carlos que era lo que estaba haciendo con mi hermana.
El reía diciendo que se equivoco! que la había confundido conmigo.
Esto me enfadó y quise darle una bofetada pero Carlos reía y quería besarme, yo me opuse.
De repente sentí que me sobaban mis nalgas por encima de mis jeans.
Una descarga eléctrica sentí por todo mi cuerpo.
Al voltear asombrada ví que era Jacobo visiblemente excitado. No supe que decir porque mi esposo solo sonreía como complicidad.
Me besó mi esposo mientras que Jacobo se pegó más a mi cuerpo dejándome sentir su paquete en mi trasero.
De pronto Carlos me susurró al oído : - Es tu cumpleaños!!!
Eso fue luz verde para dejarme sentir todo lo que cuatro manos pudiera hacerle a mi cuerpo.
Me excite más al asomarme a la sala para ver a mi hermana tratando de asimilar lo que sucedía.
Ahí en la cocina estaba en  medio de mi esposo y del amigo de mi hermana. recibiendo las caricias.
Me sentí la mujer más deseada del planeta.
Después de muchos besos cachondos y manoseos encima de mi ropa.
Me voltee hacia Jacobo, le ...

... desabroche su camisa para descubrir un torso bien trabajado en el gym.
Mis manos temblaban y dude en tocarlo, hasta que Carlos susurró de nuevo : Hazlo!!... disfrutalo...
Nos besamos y acaricie su abdomen marcado.
No supe de mi!!!...
Nos desnudamos ahí en la cocina y me encontraba de rodillas completamente desnuda frente a Jacobo también desnudo y con una imponente erección la cual no espere a que me dijera algo mi esposo.
La tome en mis manos y me la tragué de un solo bocado.
Comparando con la verga de mi esposo la de Jacobo era más gruesa y se veía muy firme y dispuesta a complacerme.
No se cuanto tiempo paso pero disfrute mucho saboreando semejante regalo.
Me sentó en una banco y me lamió mi entrepierna me hizo sentir el cielo.
Ya tenía la pucha muy mojada y caliente
Jacobo me terminó de sorprender ya que estando yo sentada me penetró pero antes de eso vi que sacó un preservativo, la verdad eso hizo que terminara de nuevo escurriendo mis fluidos.
De verdad fue un detalle que se lo agradecí infinitamente antes de ser penetrada le pedí me dejará mamarle de nuevo su verga.
Luego de un raro me penetró sentada en el banquito del comedor.
Sentir la invasión de otro miembro que no es el de mi  esposo me hizo sentir muy llena de vida.
Los mete y saca fueron aumentando poco a poco y los orgasmos no dejaban de llegar.
Mis gemidos se combinaron con los gemidos de mi hermana desde la sala.
Era obvio que este desliz no era gratis!!!
El muy cabrón de Carlos se estaba cogiendo ...