1. Perdido en el campo (2)


    Fecha: 23/04/2024, Categorías: Transexuales Autor: TACOENCAJ_5, Fuente: CuentoRelatos

    ... comencé a golpear las manos y gritar su nombre. Lo estuve haciendo por varios minutos, pero no se veía ningún movimiento, ni se escuchaba ruido alguno. Y en ese instante todo empeoró considerablemente.
    
    A unos 50 o 60 metros pasando el lugar donde estaba mi auto en la zanja, divisé a tres tipos que venían caminando por la calle. Tenía que ocultarme, e instintivamente me dirigí hacia el auto. Ese fue mi segundo error. Ellos y yo estábamos a la misma distancia del vehículo. Yo me quise apurar, pero no era nada fácil lograrlo. Yo estaba con tacos altos. Obviamente, cuando ellos se encontraban a la altura del auto, a mi me faltaban varios metros para llegar. Estaba perdido.
    
    Al principio creyeron que yo era una mujer, aunque eso podía resultar bueno o malo, según las circunstancias. Uno de ellos me preguntó amablemente:
    
    -¿Que le pasó, rubia?
    
    -Me quedé encajada y no lo puedo sacar. -contesté yo, tratando de impostar la voz.
    
    -Nosotros la vamos a ayudar, señorita.
    
    Hasta ahí parecía ir todo bien, pero uno de ellos venía con signos de estar ebrio. Se acercó a mi y me abrazó. Yo me quedé helado, sin decir palabra. El que había hablado primero le dijo que me dejara en paz, pero el sujeto no le hizo caso alguno. Y el abrazo inicial se transformo en manoseos. Obviamente me resistí, pero ese día estaba predestinado a sufrir. En el forcejeo, el tipo me tomó del pelo y se quedó con mi peluca en la mano. Todos quedamos estupefactos. Yo por el pánico que sentí, y ellos por ...
    ... descubrir que yo era hombre. A partir de ahí todo se convirtió en un verdadero desastre.
    
    El buen trato se fue a la mierda y todos comenzaron a empujarme, maltratarme e insultarme. No recuerdo todos los insultos, pero me trataron de "puto de mierda", "mariquita boba", "puto asqueroso y chupapijas", "marica culo roto", y cosas por el estilo. Yo caí de rodillas al piso y me largué a llorar como un chico. Eso los detuvo por unos instantes. Yo de reojo veía que hablaban entre ellos. Y después me hicieron una propuesta. Ellos me ayudaban a sacar el auto de la zanja y yo tenía que dejarme coger. La otra opción era que dejaban el auto como estaba y se iban a sentar a un costado para ver como me las arreglaba y me seguirían insultando y "divirtiéndose". Obviamente que debía optar por lo primero. Porque la segunda opción no me asegurara que cuando ellos quisieran no me cogieran por la fuerza.
    
    Yo pensé que cuando liberaran el auto podía tener una oportunidad para huir, pero no eran estúpidos. No me dejaron subir al vehículo. Uno de ellos tomó el volante y los dos restantes metieron un tronco debajo del tren delantero y comenzaron a hacer palanca. En el tercer intentó pudieron sacarlo. Obviamente se dirigieron a mí. Y nada de organizarnos. Me quitaron la camisa bruscamente y de un tirón me sacaron la pollera. El que estaba borracho sacó un cuchillo y me cortó la tirita de la tanga. De casualidad no me cortó a mi.
    
    Enseguida me encontré nuevamente de rodillas y con una verga frente a ...