1. Snu snu incestuoso


    Fecha: 17/04/2024, Categorías: Incesto Autor: josechad, Fuente: CuentoRelatos

    En una ciudad como cualquier otra vivía Meg, una mujer de 40 años apasionada por los entrenamientos que tenia de piel blanca, cabello negro, media 1,90 m, tenía abdominales perfectamente marcados, una figura muy femenina pero musculosa y voluptuosa, unas tetas inmensas y, lo que más resaltaba de ella, un trasero enorme y muy firme.
    
    Durante su adolescencia, Meg había sido una chica gorda y, por esa razón, se había convertido en el blanco de burlas y de bromas de todos sus compañeros de clase. Un día, cansada de ser el hazme reír de su curso, Meg fue hasta un gimnasio local, en donde se dispuso a entrenar con el fin de tener un cuerpo ideal. Con el tiempo, y a medida que su gordura iba desapareciendo, la joven Meg se fue despertando una gran pasión por el deporte y por el ejercicio, hasta el punto de que ya no entrenaba para verse delgada, sino porque realmente le apasionaba.
    
    Tras graduarse, Meg compitió en varios concursos de Señorita Musculosa, el cual era, básicamente, un concurso de belleza mesclado con uno de fisicoculturismo, en el cual los jueces no solo evaluarían el cuerpo de las participantes en base al desarrollo de los músculos, sino también en que tan bellas y atractivas era. Increíblemente, aquella muchacha que fue la burla en su adolescencia a causa de su peso y poco atractivo físico terminaría siendo nombrada, durante varios años consecutivos, la mujer más musculosa pero sexy de todo su país de origen. Con el dinero que gano en los concursos en los ...
    ... que participo, Mec consiguió abrir un muy exitoso gimnasio femenino, en donde entrenaba a chicas para que pudieran desarrollar su cuerpo ideal.
    
    Sin embargo, aunque a Meg le iba bien tanto en lo económico como en su carrera profesional, no se podía decir lo mismo de su vida sentimental pues, debido a una serie de problemas, su esposo la terminaría abandonando, dejándola sola con Dylan, su hijo de 18 años, al cual intentaba criar sola de la mejor manera posible.
    
    Pese al mal momento que le había hecho pasar su divorcio, Meg siguió entrenando, administrando su gimnasio, cumpliendo sus obligaciones como madre, y preparándose para el próximo certamen de Señorita Musculosa, el cual estaba próximo a celebrarse.
    
    De entre todos los admiradores que Meg tenía, el más grande de ellos era, sin duda alguna, su propio hijo, quien veía en ella a una figura para tomar de ejemplo debido a todas las adversidades que ella tuvo que sortear en su juventud para alcanzar el éxito. Dylan era todo lo opuesto a su madre, tanto en gustos como en aspecto físico, pues él era un joven delgado con una estatura relativamente baja (1,60 m aproximadamente), y cuyo interés radicaba en las matemáticas y no en el deporte. Aun así, y a pesar de las diferencias que había entre ellos dos, madre e hijo tenían una muy buena relación, pero todo estaba a punto de cambiar.
    
    Una noche, Dylan se fue a dormir y, a eso de la madrugada, comenzó a soñar. Dentro de su sueño, Dylan se estaba tomando una ducha muy ...
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