1. Volviendo a jugar, llegada al spa


    Fecha: 23/02/2024, Categorías: Erotismo y Amor Autor: EsposoURU, Fuente: CuentoRelatos

    Un fin de semana de relajación en el spa con mucho sexo y juguetes.
    
    Esta historia es la primera en mi perfil, la primera como autor, y la primera de un fin de semana de mucho sexo en un hotel y spa termal.
    
    Ella, mi esposa, latina, ama de casa y empleada administrativa, madre muy joven de dos hijos, baja, rellenita pero no gorda, de cola y pechos naturalmente abundantes, de ojos y pelo marrones canela, es mi esposa desde hace 32 años. Yo, morocho, de piel clara, fuertes brazos y piernas, ciclista pero no de competición, trabajador de una empresa, ambos apasionados por los viajes y con una vida sexual de pareja con altibajos después de muchos años de casados.
    
    Ella nunca ha dicho no a los juguetes sexuales que he incorporado a la cama en el correr de los años, prefiere los dildos con formas y color real de pene humano, y no es amante de los grandes tamaños, aunque hay excepciones y esta historia se centra en algunas excepciones.
    
    Hace un tiempo atrás, y luego de una etapa de pasar cierto tiempo solo con sexo vainilla, alguna vez finalizando su orgasmo con la ayuda de algún dildo, y próximos a irnos de vacaciones de fin de semana, le dije que había comprado un juguete nuevo para la ocasión. Arribados a destino, luego de entrar a la habitación, desempacamos y al finalizar la veo hurgando en mi bolso a ver si encontraba el sujeto de deseo, pero no. El sujeto estaba en otro lugar. Este era un dildo color piel, con una cabeza bastante grande, todo construido en material ...
    ... imitación piel y blando, muy blando, sin un interior rígido. Pero el tamaño era ligeramente más grande de lo normal. 2 pulgadas de diámetro o 6.25 pulgadas de circunferencia.
    
    Su cara fue de sorpresa y me recordó que no le gustaban tan grandes, pero la suavidad y textura dieron un voto de confianza a que por lo menos lo probara. Allí mismo, aún con las cortinas de la habitación abiertas, nos fundimos en un beso y mi mano buscó su húmeda ranura que me sorprendió encontrarla tan caliente y abierta, a lo que pregunté.
    
    ¿Por qué está tan abierta?
    
    Ella se tiró en la cama y señalando el dildo y su coño abierto, dijo, acá, clávalo acá, primero despacio y luego todo, acto seguido monté en la cama, lo unté con lubricante, le acerqué la bulbosa cabeza a su agujero, hice algo, muy poco de presión y entró la cabeza y medio dildo, que tiene unos 20 cm de largo, ella se montó arriba de mí, cual una amazona y con un movimiento de pelvis se devoró los siguientes 10 cm, quedando afuera solo un aro redondo que es el tope, este dildo no tiene huevos ni ventosa. Su frenética cabalgata terminó en un par de minutos, luego se bajó de mí y se dispuso a sacar el dildo, pero allí intervine yo.
    
    No, no ha terminado aún.
    
    Acuéstate boca arriba.
    
    Acto seguido le puse de nuevo las panty que ajustaron el dildo que se salía con cada movimiento. Con el dildo todo clavado dentro suyo, al ser blando se adaptaba bien a sus interiores y sus movimientos comenzó a succionarme el pene, ella estaba en ...
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