Un trío improvisado - Relatos Eróticos

Un trío improvisado

Estaba en mi casa viendo la televisión una serie que me gusta mucho, estaba tomando un poco de vino y fumando un cigarrillo tranquilamente, aprovechando que en mi casa siempre ando desnuda (como vivo sola, no hay quien me moleste), me acordé de Yesenia, una de mis amigas con derechos, a quien hace rato no veía, solo habímos hablado por teléfono, ella me habia dicho que cuando quisiera, fuera a su casa; esa tarde le tomé la palabra; quería que me diera una chupada a mi culo, ella lo hacía delicioso.

Me puse una tanga, un pantalón y una blusa de tirantes, sin bra, no muy escotada, pero cómoda; salí, me subía mi auto y me dirigí a su casa, pero antes, temia que llegar a la tienda, queria tomar un poco de vino con ella, ahyaprveché para comprar cigarros, ya que casi no tenía.

El viaje a su casa duró media hora, vivía reitrada de mi casa, agréguenle el tráfico que estaba de la chingada, por eso me tardé, no le habia avisado, pero sabía que estaría en su casa, así que no me preocupé.

Al rato llegué, vi su auto estacionado en su cochera, asíque habia buena oportunidad de que estuviera ahí,oero vi otro auto estacionado en la banqueta, tiene visita, pensé, pero no le dí importancia, reconocí el auto, era de Diana, otra amiga en común, así que me dirigí a la entrada y toqué a la puerta; tardó ella unos minutos en abrir y finalmente estuvo en la puerta, nos dimos un fuerte abrazo y nos besamos, teniamos mucho de no vernos y la sorprendí en verdad, me invitó a pasar.

Pero a ...

... pesar de eso, la noté un poquito nerviosa, cuando llegamos a la sala, vi por qué, estaba Diana con las tetas de fuera, la verdad me soprendió, porque DIana era muy tranquila, nada sexosa (que yo supiera), pero sus bubis estaban muy bien, aunque ella estuviera un poquito llenita, pero es de cara muy hermosa.

-Diana, me dejas de a seis, no mames, ¿tu y Yesenia? si las interrumpo, me voy, las puedo dejar solas.

-No te vayas, Faby, -dijo Yesenia- pero hubiera sido bueno que avisaras que venías, jejejeje,-

-Pues quise sorprenderte, pero la sorprendida fui yo.

-Apenas estamos empezando -comentó Diana- no has interrumpido gran cosa.

-¿Quieres jugar con nosotras, Faby, quieres jugar a las putas con nosotras?, dijo Yesenia, yo no lo pensé dos veces y acepté en chinga.

Las tres nos quitamos la ropa, quedé maravillada con el cuerpo de Yesenia, estaba muy rica, sus tetas medianas pero riquisimas y su panochita depilada, al igual que la de Diana, quien se tocaba levemente las tetas mientras nos veía, era señal que se estaba calentando.

Yesenia me acarició las tetas, mientras Diana me pidió un beso, me acerqué a ella y probé sus labios, besaba muy rico, sentí como Yesenia me acariciaba las nalgas y buscaba mi culo, las abrió, tocó mi agujero y despues lo besó, mmmmmm, la verdad me sentí muy bien, ella sabe cuánto me gusta que me besen el culo, y mas cuando estoy muy caliente.

Yo seguía besando a Diana, acariciaba sus tetas, la besé en el cuello y fui bajando a sus ...