Un sábado buscando machos. - Relatos Eróticos

Un sábado buscando machos.

estoy nerviosa, excitada,  no es la primera vez ni será la última, me pinto los labios de un rojo intenso, a juego con mi minifalda dos dedos por debajo de mis nalgas, es muy corta pero para este juego es lo que pretendo, tacones rojos conjuntando, mi blusa blanca de tirantes también es muy provocadora, con un generoso escote que deja a la vista la mitad de mis grandes tetas. si quiero , como no llevo sujetador, puedo con solo inclinarme ligeramente mi cintura adelante enseñar mis pezones. mi marido me contempla mientras me maquillo , una lijera sombra para los párpados a juego de mis ojos verdes. se que también está excitado. nuestros hijos se han quedado con sus primos en casa de mi hermana, ella conoce las travesuras de mi matrimonio y mañana me pedirá cuentas con pelos y señales. yo siempre me prestó,  me gusta ponerle los dientes largos y ver sus ojos de envidia. se que en el fondo es tan zorra como yo sólo que aún no se atreve a dar el paso. miro a mi hombre, lo beso ligeramente para no perder el pintalabios, lo amo, el me inició en estos juegos , descubrí un mundo nuevo de sensaciones y mi cuerpo se rindió al placer carnal. salimos del hotel en un taxi, le damos la dirección del pub donde vamos , está apartado pues es un bar de encuentros. tardamos más de media hora en llegar, mi marido no ha podido resistir en sacar mis tetas y chupar mis pezones. Urgar en el interior de mi falda y penetrame el coño con sus dedos ante la furtiva mirada del taxista. mi marido le ...

... deja una buena propina por haberlo puesto tan excitado, a mi también me ha dejado húmeda,  noto el interior de mis piernas pringosa de mis jugos, el portero me desnuda con la mirada, me siento sexi, poderosa, el local está abarrotado de gente, la luz es tenue, íntima,  vamos a la barra , mientras mi marido pide las bebidas yo ojeo las posibles presas, me gusta buscar hombres de físico normal, no tíos de gimnasio cachas que vallan de sobrado. Sino normal con sus kilitos y sus defectos , así mi hombre no se sentirá amenazado cuando me  comparta con ellos. Veo dos posibles candidatos, uno alto con un poco de barriga y una calva incipiente que está con un amigo bajito y robusto de nariz prominente, están tratando de ligar con dos chicas mucho más jóvenes que ellos. Me hacerco y me pongo a bailar frente a ellos, captó toda su atención,  las chicas pasan al olvido, me muevo sexual,  ya no me quitan ojo. Dejó que mis pezones asumen de vez en cuando por el escote, eso los pone a cien , el bajito parece el más lanzado se me hacerca y me dice al oído que me invita a tomar algo, aceptó, nos sentamos en un sofá apartados del bullicio donde apenas hay luz. Iniciamos una conversación tonta asta que se va centrando en mi, yo les digo que estoy trabajando que he venido con un cliente, cuando me preguntan a que me dedico les digo que soy puta , eso les desconcierta y se quedan sin decir nada, les digo que mi cliente le gusta compartirme con otros tíos y si a ellos les gustaría, el más bajito y ...