1. Alejandra y Elsa. Uno.


    Fecha: 24/09/2018, Categorías: Transexuales Primera Vez Gays Autor: erikavan48, Fuente: xHamster

    En el espejo, como una verdadera dama en celo, adornada por un pequeño bulto en la entrepierna, me miraba a través del humo de un cigarrillo la mujer de mis sueños: Alejandra.En un estado profundo de excitación encendí mi portátil y estuve viendo porno y masturbándome hasta las doce. A esa hora me corrí como una niña buena y me fui a dormir, no sin antes recogerlo todo bien, no quería que nadie descubriera mi secreto.No me pude resistir, y después de tenerlo todo listo cogí uno de los tangas de encaje negro para dormir. Iba a dormir con mi polla acariciada por ese fino encaje. Estaba en el cielo.Toc toc. Profundamente dormido ni me entero, y de pronto se abre la puerta. Del susto, salto de las sábanas y me quedo de pie junto a la cama. Sólo nos separaba la mesa del escritorio con mi portátil. Oh, dios, el cenicero está lleno de colillas manchadas de carmín. De pronto veo que mira al cenicero, y a continuación me mira a mi. Su cara no tenía precio. Se me había olvidado lo del tanga. Mi polla, en estado de erección mañanera, creció un par de centímetros en estos tres segundos.- Lo siento, es una situación embarazosa para usted. Tengo que hacer la habitación, toqué la puerta y no contestó nadie. Ahora mismo me voy. Perdón.- Espera, ¿qué hora es?- Las once.- Joder, me he quedado dormido.- O dormida.Mi polla creció de pronto otros dos centímetros, empezando a salir el capullo por arriba. Me miró con lujuria, entró del todo y cerró la puerta. Aun vestido de camarero, su pose era ...
    ... muy femenina. De caderas anchas, 1,60 más o menos, unos 70 k. Empezó a andar hacia mi como una modelo en una pasarela mientras me decía:- Tranquila, preciosa. Conmigo tienes bien guardado el secreto. Somos del mismo club.A un metro escaso de mi, se paró, se metió una mano en el pantalón y sacó una fina tira de encaje blanco. Ahí se me salió la polla entera del tanga y ya no podía ocultar nada.- Me tengo que ir. Mi jefa me debe andar buscando y puedo tener problemas por esto. Pero salgo a las seis, y hasta mañana no tengo nada que hacer. Si quieres me vengo y nos vestimos juntas. En secreto, nadie debe enterarse, ¿vale?- Yo termino el trabajo a las seis. Espérame aquí.Se despidió con un beso largo y profundo, recorrimos con las lenguas la boca de la otra mientras nos tocamos ligeramente las pollas.- A las seis -dijo.- A las seis y media, es lo que tardo en llegar.- Entonces te daré una sorpresita.No podía creerlo. Había quedado con una hermanita como yo. El día de trabajo fue largo y tedioso, y estuvo lleno de suspiros y erecciones. No podía quitarme de la cabeza lo que iba a pasar después, era mi sueño cumplido. En un solo día había hecho de Alejandra una persona muy especial en mi vida.Llegué a las seis y media y llamé a la puerta. Mi propia puerta.- Pasa, está abierto.Pasé. No estaba en la habitación. Las cortinas estaban echadas y algunas luces bajas encendidas. Se veía algo de luz dentro del baño, la puerta estaba entreabierta.- Ven al baño, estoy terminando. Pero desnúdate ...
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