Siendo hetero me partieron el culo - Relatos Eróticos

Siendo hetero me partieron el culo

Es inexplicable como ciertas cosas pasan en la vida pero me queda claro que hay que disfrutarlas cuando se tiene la oportunidad.

Esto me sucedió en una cabina de las ya muy conocidas.
Yo siempre he sido un chico hetero con varias chicas en mi haber así que nunca imagine lo que me pasaría.

Fui a estas famosas cabinas por mera curiosidad, y ahí estaba yo, viendo muchas cosas que no había visto antes.

Varios travestis estaban tras de mi, pero en algún momento, se me acercó un chico de estatura baja con una actitud muy amistosa.

"Ven a ver como se cogen a esta ruca" me dijo, yo obediente decido asomarme por uno de los tan mentados gloryholes.

Oh sorpresa no veo nada, al retirar la vista me encuentro con esto.
Una gran verga estaba parada a centímetros de mi cara, no lo podía creer.

Reitero siempre he sido heterosexual, pero esa tremenda verga me invitaba a comerla.
La vi con asombro y más me desconcertó su postura de seguridad.

No dijimos nada, solo tome la gran polla y la metí a mi boca.
Incrédulamente ahí estaba yo, chupando un pene como si no hubiera un mañana.
El gemia y yo me sentía muy bien al saber que mi trabajo era bueno.

De pronto me nalguea y entiendo lo que viene.

A pesar de nunca haberlo hecho, lo entiendo, por qué lo hice con muchas chicas y... Siendo honesto me emocionaba estar de el otro lado.
En ese momento el ...

... era mi hombre, quería mi culo y debía dárselo, debo desecharlo y ser una buena chica, no chistar, solo complacerlo.

Me doy la vuelta y le advierto que es mi primera vez, el gentilmente mete su cara entre mis nalgas y comienza a mamár mi culo.

A mi me encanta mamár culo de chicas es una de mis aficiones favoritas en la vida, pero sentir esa lengua entre mis pliegues y dentro de mi culo fue muy satisfactorio.

De pronto la enorme cabeza de su verga se posa en la entrada de mi ano.
Respiro y el embiste, siento como hay un dolor en todo mi cuerpo y la saco.

Me relaja diciéndome, tranquila dame ese culo por favor.

Amplio más mi culo y vuelve a embestir, ahora entra con más facilidad y siento un placer inexplicable.
Taladra mi culo y yo empiezo a gemir como una vil puta.
El sigue dándome duro y sin miramientos y yo entiendo que mi culo está a su servicio.

Pasa un rato y el sigue penetrando, me da duro y parece que su intención es lastimarme, pero mi culo aguanta todas y cada una de las embestidas, yo disfrutando no puedo creer como esa tremenda verga ya no me hace nada.
Soy una putita muy buena si me lo propongo también.

Gime y puedo sentir las contracciones de ese enorme pene en mi culo.
Ahí esta, tirando leche sobre mi ano, siento ese calor, lo disfruto lo logre... Desleche a mi macho, quedo satisfecho, mi culo fue satisfactorio para el.