Mi cuñado Anas - Relatos Eróticos

Mi cuñado Anas

... Me acomodé otra vez boca abajo y con las dos manos me abrí mi ano. Con lo mojada de su verga, y lo caliente que estaba yo, sentí que me entraba la cabeza y aunque me dolía un poco, me la fue metiendo más y más, hasta que la tuve toda adentro. Empezó a bombearme como todo un macho ardiente cogiendo a su hembra. Yo gritaba de dolor y placer. Era algo que nunca había experimentado ni me imaginaba que iba a pasar esto con mi cuñado. No quería que se detuviera. Empezamos a sudar ambos de tan rica cogida que me estaba dando mi cuñado Anas, hasta que después de un buen rato, se vino ricamente terminando dentro de mi colita. Sentí cómo su rica verga se estrujaba mientras me disparaba su carga de leche, una y otra vez.
Cuando me la sacó, mamé de nuevo su pene para tragarme el resto de leche que le quedaba.
Me preguntó que si me gustó, a lo que yo le dije que lo había disfrutado al máximo. Que nunca lo había hecho, que era mi primera vez y que él era un macho muy cogedor.
Así quedamos dormídos, satisfechos ambos.
Durante esa semana, me penetró sabrosa y ricamente con ardientes cogidas. Hasta ahora guardamos el secreto.
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