LA CULEADA IMPERDIBLE: TRIO EN EL SAUNA - Relatos Eróticos

LA CULEADA IMPERDIBLE: TRIO EN EL SAUNA

Es la continuación del relato: LA CULEADA IMPERDIBLE: CON EL PERSONAL TRAINER, el link: http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-39971.html les recuerdo que NO SE NECESITA LEER LOS ANTERIORES RELATOS PARA DISFRUTAR ESTE. Me describiré, Yo soy Ricardo (Ricky), blanco, velludo, barba corta, ojos miel, cuerpo de gym (sin exagerar), 1.82 cm, 25 años. Fernando es mi amigo de la oficina, trigueño claro, semivelludo, ojos claros, 1,80cm, cuerpo muy trabajado del gym (pechos fuertes y nalga redonda, levantada y firme), 26 años. Martín es el personal trainer de Fernando, mide 1,85, cuerpo muy trabajado, hombros anchos, pectorales armados, piernas gruesas, abdomen firme, piel bronceada, cabello de corte militar y unas super nalgotas. Nos encontramos en un junte de amigos al cual Fernando y yo fuimos invitados por Martín (personal trainer), es un domingo soleado, en un condominio con piscina y sauna; hay muchos hombres atractivos invitados, todos somos heterosexuales, masculinos y machos. MOMENTO I Cuando aún no había recuperado el aliento de la tremenda cogida que le proporcioné a Martín, pudimos ver que Fernando estaba entrando en su vehículo por las rejas del condominio, -habían pasado 35 minutos-, inmediatamente Martín entró a asearse a la ducha y salió en segundos, luego me dijo que iría al patio central donde se realizaba el junte, mientras yo me lavaba de forma “veloz”, para que así no levantemos sospechas de nadie, salió todo perfecto. Salgo de la ducha lo más rápido que ...

... puedo y voy a la zona de la piscina y me tiro un tremendo clavado, pude ver como Fernando ya estaba conversando con Martín en el patio del junte, se lo veía muy contento y desestresado, sin duda ese Martín era todo un maestro en disimular desde las apariencias hasta su orientación. Algunas personas también nadaban cerca de mí. Ver tantos culos y vergas atrapados en speedos y trusas me dejaba arrecho, los cuerpos ceñidos y marcados de aquellos machos como yo, me ponía la verga dura como el metal, más aún al nadar los roces eran inevitables y deliciosos, era cuestión de tiempo para que alguno de esos culos sea penetrado por mi verga gruesa. Hasta se me pasó por la mente hacerme una paja en un rincón de la piscina, por supuesto esto era imposible. Fernando me sonríe y ondea el brazo a la distancia (la piscina estaba a una distancia de 50 metros del patio principal), luego se acerca y me pregunta: -Fernando: ¿qué tal está el agua? -Yo: súper, como para cogerte en ella jajaja -Fernando: jajaja ya me toca cogerte a vos bro jajaja. -Yo: todo a su tiempo jajaja ¿y no te vas a meter? Aunque sea quiero manosearte en el agua. -Fernando: jajaja sí sí bro, iré a cambiarme. Caminó con dirección al departamento, pero tenía que pasar antes por el patio principal, cuando Fernando llega al patio principal, Martín le agarra el brazo y ambos se ríen, veo que conversan algo, y luego caminan juntos en dirección al departamento, incluso el brazo de Martín iba sobre el hombro de Fernando -un gesto de ...